Con la finalidad de atenuar las presiones financieras y reducir la carga fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex), el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto mediante el cual la empresa ampliará de 150 mil barriles diarios a 400 mil la producción de crudo que estará exenta del pago de los derechos de utilidad compartida al gobierno federal que graban onerosamente estos ingresos. Con esta operación, Pemex dejará de trasladar en este año 25 mil millones de pesos a la Secretaría de Hacienda.

En paralelo, López Obrador anunció que en septiembre próximo, conjuntamente con el envío de la iniciativa de Ley de Ingresos y el paquete presupuestal para 2020, remitirá al Congreso un proyecto de reforma que modificará el régimen fiscal de Pemex. Destacó que el mecanismo del decreto no requeriría una adecuación legal, pero con el objetivo de mejorar su situación fiscal de fondo se adaptará el marco legal.

Dos esquemas de explotación

El secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, detalló que en la actualidad Pemex opera mediante dos esquemas de explotación: uno, referente a la asignación de contratos normales en un sistema tributario muy similar al resto del mundo en el que hay impuesto sobre la renta y derechos de extracción de hidrocarburos.

Otro esquema involucra al gobierno federal, bajo el régimen de derechos de utilidad compartida. “Esencialmente lo que el gobierno hacía es que le decía a Pemex: ‘tú tienes utilidades, pero son tuyas y mías, es compartida y entonces tú me vas a tener que dar de eso una cierta cantidad’, y esos son los famosos derechos de utilidad compartida”.

Con la firma del decreto, dijo Urzúa, se permitirá a Pemex migrar pozos explotados bajo este régimen al modelo de contrato normal. Eso dará un respiro enorme a Pemex y sobre todo va a ayudar a que algunos de estos pozos, que no eran rentables porque ya están viejos, porque ya estaban casi cerrados, que no eran rentables porque el derechos de utilidad compartida era muy alto, ahora puedan volver a explotarse.

El director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, subrayó que para compensar esa pérdida de recursos que ya no se trasladarán a Hacienda por el decreto y a partir del nuevo régimen fiscal la intención es incrementar la producción de aceite y por lo tanto compensar de esa manera.