La ratificación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) puede hacerse de manera simultánea en los tres países, manifestó Ricardo Monreal, coordinador de Morena en el Senado.

Después de reunirse en privado con el Consejo Coordinador Empresarial, expresó que se está buscando que ese pacto comercial sea ratificado entre agosto y septiembre en los tres países.

Tengo comunicación con los dos congresos, el de Estados Unidos y el de Canadá, y queremos aprobarlo simultáneamente, aseveró antes de enfatizar que el proceso electoral estadunidense afecta el calendario.

He estado hablando con congresistas de Estados Unidos, algunos demócratas e incluso algunos republicanos, y en Canadá también en el Parlamento. Hemos establecido un principio de acuerdo: que lo aprobemos de manera simultánea, subrayó.

Sin embargo, resaltó que si hay cartas paralelas que propongan la modificación del T-MEC entonces el proceso se postergará. Nosotros lo aprobaríamos, lo ratificaríamos de manera simultánea entre agosto y septiembre, insistió.

Indicó que tras la reforma a la Ley Federal del Trabajo los representantes del sector privado han planteado un decálogo de señalamientos, situación que el Senado ha ofrecido resolver entre julio y agosto en un parlamento abierto, donde empresarios, todas las cámaras, inversionistas y centrales obreras, con los trabajadores, puedan establecer, con toda apertura, un mecanismo de vinculación para reformar todavía no sólo la norma laboral, sino otras que son perfectibles permanentemente.

Faltaron dos o tres cosas en la ley laboral, que ellos están pidiendo que se incorporen, así como los trabajadores, agregó.

Las leyes son perfectibles y la idea es que por conducto de ese mecanismo denominado parlamento abierto todavía sigamos mejorando la legislación en la materia, pero también ellos hablaban de otras cosas, la parte económica, la inversión, el desarrollo industrial, la seguridad jurídica y cómo hay una mayor vinculación del Congreso con ellos, el T-MEC, comentó.

Indicó que se busca establecer un diálogo con el sector privado, pues frente a la alternancia política, la transición que vive el país desde julio del año pasado, se quedó sin interlocutores en el Congreso, en el gobierno, y ellos lo saben.

Comentó que, con el ánimo de estrechar el acercamiento, el Senado busca ser ese interlocutor para generar confianza, generar estabilidad y garantizar que el estado de derecho está por encima de todo y que se va a observar como nunca con el Presidente actual.