a revancha para Cruz Azul llegó más pronto de lo esperado. La Máquina tendrá en cuartos de final la oportunidad de exorcizar sus demonios, de sacudirse la opresión del América que fue su verdugo en las dos recientes finales que alcanzó. Sobre todo, tiene en bandeja de plata la gran oportunidad de reconciliarse con una afición que se cansó de las burlas, de ser el hazmerreír y que, dolida, dejó de ir al estadio.

Fue vergonzosa la actuación de los celestes en la disputa por el título Apertura 2018, cuando como nunca ilusionaron a sus seguidores con un torneo impecable, impresionante. Pero tener enfrente la playera amarilla los paralizó y sucumbieron sin meter las manos. De nuevo la situación se presenta favorable: llegan con una secuela de 10 partidos sin derrota; no obstante, dieron varios juegos soporíferos, como el del sábado ante el Morelia.

Sin duda los aficionados responderán y harán caso omiso a los exabruptos del técnico Pedro Caixinha, quien hace unas semanas emprendió contra la prensa y recientemente hizo reproches al público. El portugués acusó a la gente de estar con el equipo sólo en las buenas. ¿Qué sabe él de 21 años de espera?, ¿qué sabe de ser blanco fijo del bullying futbolero?... Es un novato en eso de sufrir y llorar como una Magdalena.

Caixinha está bajo la lupa y deberá mostrar el aprendizaje obtenido tras la final perdida. Al arranque del presente certamen dijo que, para motivar a su plantel, pondría a sus jugadores ante la foto del gol de Edson Álvarez. Esperaba así hacer germinar la semilla de coraje; pues bien, llegó la hora de explotar y encauzar esa furia. Enfrente está Miguel Piojo Herrera, uno de los mejores entrenadores de la actualidad, ansioso por el bicampeonato y que se sentirá dos veces local.

Tigres se medirá a Pachuca y Rayados, ganador de la Concachampions, ante un Necaxa ya sin su ariete Brian Fernández, con los momios en favor de los equipos regiomontanos. Mención especial merece el León-Xolos. Los Panzas Verdes llegan con la marca de 41 puntos logrados, con Ángel Mena como líder romperredes y con ganas de reflejar en la liguilla su gran torneo. En tanto, Xolos sigue siendo el gran favorecido del VAR y en el decisivo partido ante Puebla no fue la excepción.

En polémica decisión anularon un gol a los de la franja por presunta mano de Lucas Cavallini y después expulsaron de forma rigorista a Vladimir Loroña. Y ya ni mencionar la ayuda que el técnico de la Sub-20 les dio convocando a jugadores para dar cumplimiento a la regla 20/11… Sólo se inconformaron Ricardo La Volpe y el Chelís Sánchez Solá. ¿Será porque Xolos ha colocado publicidad de su casa de apuestas en varios equipos? Todos están agradecidos.

Veracruz se convirtió en el peor club del futbol mexicano y uno de los peores del mundo. Debería irse directo a la segunda división, porque el torneo de ascenso también le queda grande. Pero le bastará pagar 120 millones de pesos para quedarse a seguir haciendo el ridículo. Sin embargo, los federativos ya maniobran haciendo manita de puerco al polémico Fidel Kuri y forzándolo para que venda su franquicia. No encaja en su inmaculada línea de valores.

El directivo del Atlas Gustavo Guzmán proclama implícitamente su incapacidad para manejar un equipo, tira la toalla y lanza un SOS a Alejandro Irarragorri de Grupo Orlegi, quien no pudo hacer llegar a buen puerto a Santos Laguna ni al Tampico, pero tuvo con los albiverdes algunos torneos gloriosos cuando era amigo y confidente de Decio de María, y tenía acceso a información privilegiada.

No sólo en la política hay chapulines. No obstante, en una liga con real juego limpio sería imposible que un alto directivo se lleve los secretos de un club a otro con quién sabe qué truculentos pactos. El propio Irarragorri precisó que son siete opciones para ese extraño maridaje entre Tv Azteca-Atlas y Orlegi-Tampico Madero. Lo cierto es que en la federación siguen cocinándose situaciones que ya no sorprenden a nadie.

Tomás Boy se aferra al timón del Guadalajara, lo suyo ya es penoso. La liga femenil es el reflejo de la varonil. Los equipos que invierten son los abocados al cetro. Las Tigrillas de la UANL esperan rival y el máximo platillo sería toparse de nuevo con las Rayadas si Pachuca no dice otra cosa.

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