El dilema que habrán de resolver senadores y diputados de Morena antes del miércoles próximo, pasará por modificar las reservas que presentó la oposición a todos los artículos de la reforma educativa el pasado martes, o mediante un acuerdo político que les dé mayoría calificada en ambos plenos aprueben en los términos que la Cámara de Diputados determinó y envió a su colegisladora como minuta.

La intervención de los opositores al gobierno federal en el Senado tuvo su efecto en todos los artículos en materia de la rectoría del Estado; en la admisión, promoción y reconocimiento del personal docente y en la conformación del Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación, entre otros.

De tal forma, los artículos reservados al dictamen contienen los siguientes señalamientos: en el tercero constitucional se observó que la educación se basará en el respeto irrestricto de la dignidad de las personas, con un enfoque de derechos humanos e igualdad sustantiva.

También se enfatizó en un tema controvertido, como el de la admisión que se realizará a través de procesos de selección a que concurran los aspirantes en igualdad de condiciones y establecidos en la ley prevista en el párrafo anterior, los cuales serán públicos, transparentes, equitativos e imparciales, y considerarán los conocimientos, aptitudes y experiencia necesarios para el aprendizaje y el desarrollo integral de los educandos… lo dispuesto en este párrafo en ningún caso afectará la permanencia de las maestras y los maestros en el servicio.

Los senadores también reservaron la obligatoriedad de la educación superior, correspondiente al Estado, y tanto las autoridades federal y locales establecerán políticas para fomentar la inclusión, permanencia y continuidad.

Tras la operación política del senador Ricardo Monreal Ávila, quien consiguió un voto mayoritario en lo general para el dictamen, la oposición compuesta de panistas, priístas, Movimiento Ciudadano y PVEM cambió el panorama al reservar prácticamente todo el documento para la discusión en lo particular, y junto con el senador Salomón Jara (Morena) echó abajo la votación calificada del texto.

Además de las observaciones en el artículo 31, las reservas de la oposición tocaron el 73 de la misma Constitución, en lo referente a establecer el sistema para la carrera magisterial. Y en los transitorios también se reservaron once de los 18. Sobre todo el segundo, que a la letra establece: a partir de la entrada en vigor de este decreto, se abroga la Ley General del Servicio Profesional Docente, se derogan todas las disposiciones contenidas en las leyes secundarias y quedan sin efectos los reglamentos, acuerdos y disposiciones de carácter general contrarias a este decreto.