Miércoles 17 de abril de 2019, p. 23
Washington. El gobierno de Donald Trump activará este miércoles una norma que permitirá demandar en Estados Unidos a empresas extranjeras presentes en Cuba que gestionan bienes confiscados tras la revolución, terminando así con una exención que se mantenía desde hace dos décadas, indicó este martes un funcionario estadunidense.
Esta ley, que lleva los nombres del senador de extrema derecha Jesse Helms y del representante Dan Burton, fue aprobada después de que Cuba derribó sobre sus aguas territoriales dos aviones fletados por activistas cubanos exiliados. Fue promulgada el 3 de marzo de 1993 y puso fin a los intentos del entonces presidente Bill Clinton para reconstruir los vínculos entre ambos países.
John Bolton, consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, anunciará la medida este miércoles durante un acto en Miami en el que se reunirá con veteranos de la fallida operación de Playa Girón.
El 12 de abril, Bolton anunció que participaría en un acto con los veteranos para anunciar importantes pasos dados por el gobierno
con la finalidad de enfrentar las amenazas a la seguridad relacionadas con Cuba, Venezuela y la crisis democrática en Nicaragua.
El portal Cubadebate indicó sobre este tema: “el título tercero viola la legislación internacional al permitir demandas contra entidades cubanas o extranjeras que ‘trafiquen’ con propiedades nacionalizadas de manera soberana y con apego a la legalidad tras el triunfo de la revolución en enero de 1959”.
Agregó que Cuba llegó a acuerdos de compensación con países como Reino Unido, Canadá, España, Suiza, Italia y Francia, cuyas empresas también fueron nacionalizadas. Pero Washington se negó a aceptar las condiciones ofrecidas por La Habana, dado que para entonces ya planificaba la invasión de Playa Girón, en abril de 1961.
Pero desde la aprobación de la norma, los gobernantes estadunidenses habían postergado la entrada en vigor de esa cláusula cada seis meses, para evitar problemas con países aliados que tengan empresas en la isla que podrían ser objeto de tales demandas.
Por otra parte, Estados Unidos acusa a las autoridades de La Habana de apoyar al gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y como parte de las sanciones contra el sector petrolero de Caracas ha penalizado a empresas que llevaban crudo venezolano a la isla.
El vínculo entre Cuba y Estados Unidos se deterioró aún más desde la llegada a la Casa Blanca de Bolton, quien en noviembre pasado anunció acciones directas
contra lo que denominó la “troika de la tiranía”, integrada por Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Los años de consecutivas prórrogas (de la aplicación del título tercero de la ley Helms-Burton) han creado una falsa sensación de impunidad
, sostuvo el representante anticastrista Mario Díaz-Balart.