El gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, advirtió en el Senado de la persistencia de riesgos que pueden afectar la economía, entre los cuales mencionó la incertidumbre de los inversionistas y empresarios respecto de la política interna del país, la inseguridad, la corrupción, la impunidad y la falta de estado de derecho.

Al comparecer ante la Comisión de Hacienda del Senado, Díaz de León manifestó: El entorno en el cual estamos sigue presentando importantes riesgos de mediano y largo plazos tanto en lo externo como en lo interno. Hay elementos que pueden afectar las condiciones macroeconómicas en el país, la capacidad de crecimiento e incluso el proceso de formación de precios.

Senadores de PRI, PAN y PRD preguntaron a Díaz de León si la preocupación de los inversionistas surge también por ciertas decisiones, como la de cancelar proyectos relevantes para el desarrollo.

En respuesta, el responsable del Banco de México detalló: Lo que recabamos con analistas y empresarios respecto de los elementos de política interna refleja lo que puede estar frenando detonar proyectos de inversión.

Agregó: Siempre, en un cambio de administración, hay prioridades, se definen agendas, se establecen prioridades de rumbo, pero de la manera más rápida y más atinada posible que se tomen las decisiones se pueden diluir los elementos que frenan la inversión.

En su intervención inicial, expuso que desde hace varios años el estancamiento de la inversión ha sido sostenido. Explicó que en las encuestas realizadas por el Banco de México con analistas y directivos empresariales salen a relucir las causas.

Precisó que en esas encuestas se preguntó acerca de los tres principales factores que a su juicio podrían obstaculizar el crecimiento de la actividad económica a escala nacional y local, y el primero que mencionaron se refiere a la gobernanza e incluye problemas de inseguridad pública e incertidumbre de política interna, corrupción, impunidad y falta de estado de derecho.

Mencionaron también, agregó, el aumento en los insumos y materias primas, la política monetaria, incluso con los costos de financiamiento, pero es la incertidumbre sobre la situación económica interna, los riesgos sobre la plataforma de producción petrolera y la ausencia de un cambio estructural lo que más les preocupa.

Díaz de León resaltó ante los legisladores que esos son algunos de los elementos que están gravitando en sentido adverso sobre la actividad económica.

Ante ese panorama, destacó, el Banco de México decidió mantener “una estrategia macroeconómica sólida, prudente, buscando mantener una inflación baja y estable.

▲ Al comparecer en el Senado, Alejandro Díaz de León aconsejó impulsar medidas que propicien más confianza y certidumbre para la inversión.Foto Jesús Villaseca

Asimismo, mantener finanzas públicas sólidas e instituciones financieras también sanas y capaces de resistir volatilidad y choques.

Al final de su primera intervención, el gobernador del Banco de México aconsejó impulsar medidas que propicien mayor confianza y certidumbre para la inversión, mayor productividad, uso de tecnologías y proveer certeza jurídica.

Con el propósito de incentivar la inversión privada, apuntó, es necesario revisar el diseño institucional de incentivos, de modo que se privilegie la creación del valor, se impulse la adopción de tecnologías de punta, se mantenga la apertura comercial y de flujos de inversión, y se fomente la competencia económica.

Insistió en que debe hacerse un esfuerzo con la finalidad de que, de manera continua, la economía siempre ofrezca una alternativa de inversión. Recordó que el pronóstico de crecimiento para 2019 se ubica entre 1.1 y 2.1 por ciento, y para el próximo año entre 1.7 y 2.7, con una inflación de 3 por ciento al primer semestre.

En ese sentido, sostuvo, “ha costado mucho trabajo regresar a esa meta, ya que en los meses recientes ha estado entre 3.5 y 3.7 por ciento, y expuso que durante el tercer y cuarto trimestres de 2018 ha habido una desaceleración en el crecimiento

En la sesión de preguntas y respuestas, los legisladores le solicitaron que hablara sobre las posibles repercusiones que tendría el hecho de que el tratado comercial con Estados Unidos y Canadá (T-MEC) no se ratifique.

Díaz de León consideró que sería una mala noticia en el ámbito comercial y requeriría un ajuste más permanente en el tipo de cambio real. De darse tal escenario, agregó, trataremos que el ajuste se dé de la manera más ordenada y facilitando que la economía tenga esa corrección o ese ajuste a las nuevas condiciones de la manera más ágil posible.

Al ser interrogado por la senadora Vanessa Rubio (PRI) acerca de la posible utilización de recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios para sanear Pemex, como propone la Secretaría de Hacienda, manifestó que podría ser una medida adecuada, siempre y cuando garantice un incremento sostenido en los ingresos públicos y en los de la petrolera.

Destacó, sin embargo, que aún no hay elementos concretos para definir si la utilización de recursos de ese fondo propiciarán un incremento sostenido en los ingresos presupuestuarios en el mediano y largo plazos, o si únicamente están atendiendo un elemento de corto plazo.