Gantz admite la derrota
Es el gobernante con más años en el poder en la historia del país; supera al legendario Ben Gurion
Jueves 11 de abril de 2019, p. 25
Tel Aviv. Benjamin Netanyahu, del ultraderechista partido Likud, ganó su quinto mandato como primer ministro de Israel, luego de un recuento casi total de votos, que lo deja en mejor posición que su adversario, el ex militar Benny Gantz, quien aceptó su derrota en los comicios celebrados el martes pasado.
El presidente estadunidense, Donald Trump, felicitó a Netanyahu, de 69 años, por su triunfo.
Con esto, el actual gobernante, pese a que enfrenta acusaciones de corrupción, se convertirá en el primer ministro con más tiempo en el poder en la historia del Estado de Israel, superando al legendario David Ben Gurion.
Al final de la campaña electoral, Netanyahu hizo un claro llamado a su electorado más radical al afirmar, en desafío a un amplio consenso internacional, que estaba preparado para anexar los asentamientos israelíes en Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel desde hace medio siglo.
Semejante anexión haría probablemente imposible la solución de un Estado palestino coexistiendo con Israel.
El pueblo de Israel me ha respaldado para un quinto mandato (de cuatro años) y me ha expresado una confianza todavía mayor
, dijo el primer ministro, quien admitió que ya inició contactos con otros partidos de la derecha en busca de una coalición.
El movimiento islamita palestino Hamas, que controla la franja de Gaza, consideró que cualquiera que sea el ganador de las elecciones en Israel no tiene diferencia.
Todos los partidos sionistas representan la cara de la misma moneda, que es la ocupación
, sostuvo en un comunicado.
De acuerdo con las proyecciones, el partido Likud debería obtener aproximadamente el mismo número de escaños (35) que su principal adversario, el partido Azul y Blanco, del ex militar Benny Gantz, de 59 años.
Pero con la casi totalidad de los votos ya escrutados, los números muestran que el Likud y un pequeño grupo de partidos de derecha, reunidos en coalición, obtendrían alrededor de 65 bancas en el Parlamento (de un total de 120), suficientes para formar gobierno.
Más de 6.3 millones de electores fueron convocados para elegir los 120 diputados que los representarán en la Knesset. La participación fue de 67.9 por ciento de los electores, contra 71.8 por ciento en las legislativas de 2015.