En los primeros 100 días de la nueva administración, elementos de la Policía Federal se han enfrentado en 23 ocasiones con integrantes del crimen organizado, principalmente en Tamaulipas, Puebla, Michoacán y Guanajuato.

De acuerdo con datos de la corporación, que depende de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, cuatro elementos federales han perdido la vida en esas confrontaciones y seis resultaron lesionados, en tanto que siete probables miembros del crimen organizado murieron.

Aunque la nueva estrategia del Plan Nacional de Paz y Seguridad se basa en la no confrontación con armas de fuego, sino en la desarticulación financiera de los grupos delictivos, los policías federales han tenido que repeler las agresiones.

El reporte de la dependencia señala que en Tamaulipas se han enfrentado en cinco ocasiones con miembros de grupos criminales; en Puebla, Michoacán y Guanajuato, cuatro en cada uno; estado de México, tres, y Querétaro, Sonora y Veracruz, una.

En el desglose de datos destaca que los grupos criminales atacaron a los elementos federales en los municipios de Nuevo Laredo, Matamoros y Reynosa, Tamaulipas, zona en que se disputan la plaza los cárteles del Noreste y otras escisiones del del Golfo y Los Zetas.

Por otra parte, los enfrentamientos en Guanajuato han sido en los municipios de Acámbaro y Celaya; este último toma relevancia porque es una de las zonas en que opera el cártel de Santa Rosa de Lima, que lidera José Antonio Yépez, El Marro.

En Puebla, los federales tuvieron un enfrentamiento en Palmar de Bravo, municipio enclavado en el llamado Triángulo Rojo, donde prolifera el robo de combustible en los ductos de Petróleos Mexicanos.

La nueva estrategia de seguridad ya opera en 150 de las 266 regiones en que se dividió el país. Sin embargo, el secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, ha reconocido que en algunas se opera con algunas limitaciones por falta de elementos.