Jueves 4 de abril de 2019, p. 22
Tegucigalpa. Cada día, en promedio, muere un menor de 18 años en Honduras debido a la violencia, aun cuando en el país no hay un conflicto armado, aseguró este miércoles la directora ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Henrietta Fore.
Agregó que a pesar de los esfuerzos por reducir la violencia y proteger a sus ciudadanos más jóvenes, Honduras sigue siendo un lugar peligroso para demasiados niños y jóvenes
debido a las bandas, que los enfrentan a una elección: únete a nosotros o muere
.
Ante este panorama abandonar la escuela es, a menudo, la única salida de los jóvenes para escapar de las amenazas de las pandillas, del acoso y del reclutamiento forzoso
, indicó.
La consecuencia es que más de medio millón de menores en edad de cursar educación secundaria están fuera de las aulas.
Fore explicó que “la combinación de violencia, pobreza y falta de oportunidades educativas está causando que miles de niños y familias huyan de sus hogares sin acceso a protección o a rutas de migración seguras, por lo que la mayoría se ven obligados a emprender viajes peligrosos.
Una mujer que conocí en San Pedro Sula me aseguró que no están migrando para tener una vida mejor, sino para sobrevivir
, comentó la experta estadunidense.
Si no se abordan las causas de la migración, los niños y sus familias seguirán embarcándose en viajes migratorios peligrosos
, advirtió.
Miles de hondureños, incluidos muchos menores, han emigrado a Estados Unidos en caravanas que incluyen a salvadoreños y guatemaltecos, lo que provocó una reacción airada del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien suspendió la ayuda a esos tres países centroamericanos.
Fore llegó a Tegucigalpa el pasado domingo para conocer las causas de la migración y se reunió con autoridades y niños de la comunidad rural de Pajuiles, en San Pedro Sula; también estuvo en Tegucigalpa.