Túnez. Los líderes árabes dejaron de lado este domingo sus rivalidades regionales para condenar la decisión estadunidense de reconocer la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán, y señalaron que la estabilidad en Medio Oriente dependerá de la creación de un Estado palestino.

Esta cumbre anual de la Liga Árabe se llevó a cabo en Túnez, luego de que hace menos de cuatro meses Washington reconoció a Jerusalén como capital israelí, decisión que también ocasionó la condena del mundo árabe, debido a que los palestinos exigen que Jerusalén oriental sea la capital de su futuro estado en Cisjordania y la franja de Gaza.

Los participantes, 22 miembros, con la ausencia de Siria, miembro fundador pero expulsado a raíz de la guerra civil que comenzó en 2011, presentaron un frente común contra las políticas en la zona del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y reiteraron su rechazo a la ocupación israelí en Jerusalén Oriental y Cisjordania, territorios ocupados por Israel en la guerra de 1967.

En la inauguración, el rey de Arabia Saudita, Salmán bin Abdulaziz, afirmó que rechaza cualquier medida que socave la soberanía de Siria sobre los Altos y que apoya la creación de un Estado palestino en Cisjordania y la franja de Gaza con Jerusalén Oriental como su capital.

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, quien asistió a la cumbre, reiteró el apoyo internacional a un Estado israelí y un Estado palestino que vivan lado a lado en paz, dentro de fronteras seguras y reconocidas, y con Jerusalén como capital de ambos. A esta reunión también asistió Federica Mogherini, jefa de política exterior de la Unión Europea, y Moussa Faki, presidente de la Comisión de la Unión Africana.

En tanto, Israel reabrió los pasos fronterizos hacia Gaza, en medio de negociaciones para una tregua, tras seis días de cierre por el disparo de un cohete desde la franja de Gaza, seguido de una nueva escalada de tensión entre Tel Aviv y el movimiento Hamas.

El sábado pasado hubo enfrentamientos que dejaron cuatro palestinos muertos y cientos de heridos. Desde el 30 de marzo de 2018 miles participan semanalmente en la Gran Marcha del Retorno a lo largo de la frontera.