Casi un centenar de médicos residentes del Instituto Nacional de Psiquiatría Juan Ramón de la Fuente acordaron levantar de forma temporal y bajo protesta el paro de labores que iniciaron ayer por la mañana en demanda del pago de su beca y del llamado bono de riesgo, aunque destacaron que de no tener una solución definitiva para el pago completo de sus salarios, suspenderán nuevamente sus actividades el próximo 8 de abril.

En tanto, la Secretaría del Salud (Ssa), de la cual depende el instituto, informó por la noche que por instrucciones del titular de la dependencia, Jorge Alcocer Varela, se realizó una reunión entre directivos del instituto, de la dirección general de Recursos Humanos, y de Calidad y Educación en Salud, para revisar sus demandas laborales.

Indicaron que la principal causa del paro laboral se relacionó con el atraso en el pago de las becas, del cual se les ratificó la información que se les había proporcionado el 28 de marzo, sobre el hecho de que su pago se hará el próximo jueves.

No obstante médicos residentes afectados señalaron que la reunión con el director general del instituto, Eduardo Madrigal de León, estuvo llena de matices y amenazas, incluso se calificó nuestro movimiento como huelga ilegal, cuando era un paro de actividades. El directivo nos recibió con el abogado y nos empezó a leer el reglamento y nos dio un límite de tiempo, pues nos dijo que a partir de las 12:00 horas habría consecuencias, es decir, el cese de nuestra relación laboral.

Manuel Hernández, médico residente del cuarto año de especialización, señaló que los compañeros le preguntamos si esto se lo aplicaría a los 91 médicos que participamos en la protesta, y nos contestó que a eso lo estábamos obligando.

Explicó que la demanda por la que realizaron el paro de labores no fue únicamente por la demora en el pago de nuestros salarios, pues se nos adeudan las dos quincenas de marzo, sino principalmente por la falta del pago del bono de riesgo, el cual se aplica en otros institutos y hospitales donde el personal de salud enfrentan condiciones de riesgo por su actividad médica y nosotros no debemos ser la excepción.

Estamos abiertos al diálogo y a la conciliación, indicó, pero queremos que se nos respeten nuestras condiciones de trabajo. No estamos pidiendo más de eso, insistió.

Por ello, anunció que sus compañeros se reincorporaron a sus actividades bajo protesta en espera de que se dé una respuesta definitiva a nuestras demandas, y agregaron que en caso de no tener una solución reiniciarán el paro el próximo 8 de abril.

Tanto la Ssa como los médicos señalaron que pese al paro nunca estuvo en riesgo la atención de los pacientes, pues los afectados cumplieron con sus guardias en las áreas de mayor prioridad, como urgencias, sin ninguna interrupción.