Sábado 30 de marzo de 2019, p. 26
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, aseguró que no cederá a los chantajes de la sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSS), que mantienen bloqueado el acceso a la clínica Condesa, especializada en tratamiento para personas con VIH-sida, para que se les otorguen las plazas laborales que se encuentran vacantes.
No vamos a caer en ninguna presión relacionada con la corrupción. Hay un esquema en donde el sindicato decidía las plazas junto con el gobierno, y en eso no estamos de acuerdo para un tema tan delicado como la salud
, expresó la mandataria tras respaldar la labor de la directora de la clínica, Andrea González Rodríguez, a quien describió como una persona comprometida y honesta.
Indicó que se hace una evaluación junto con la Secretaría de Salud para que todo el sistema tenga médicos suficientes y medicamentos, por lo que no van a permitir que sea el sindicato el que defina a quién le corresponden las plazas que por ahora se encuentran congeladas: Ahí sí no vamos a ceder
.
Agregó que se analizan las alternativas para que la atención a los pacientes de la clínica no se vea afectada.
El conflicto entre las autoridades de salud y la sección 18 de ese gremio por la asignación de 18 plazas generó ayer un enfrentamiento, la retención de personas y acusaciones de ambas partes sin que ninguna autoridad mediara, por lo que el servicio tuvo que suspenderse.
Un día antes la directora de la clínica declaró que no se presentaría al sanatorio para evitar conflictos, pero ayer ingresó por la fuerza flanqueada por representantes de varias ONG, lo cual originó una confrontación entre trabajadores y activistas.
Los integrantes de las organizaciones civiles se apoderaron de la clínica por varias horas y algunos pacientes se alteraron porque adentro se hablaba de posibles enfrentamientos; había caos y mucha tensión que se agudizó cuando cerraron las puertas y los pacientes no pudieron salir.
Una joven entró en crisis y a gritos exigía que la dejaran salir, pero los que tenían el control del acceso se negaron, pero luego de un rato se permitió la salida de la gente.
Los trabajadores del lugar también fueron agredidos por grabar con sus teléfonos lo que sucedía, incluso a una mujer intentaron despojarla de su móvil.
Los activistas señalaron que la sociedad civil exige la salida del sindicato y eso no está a negociación. Por su parte, el representante de la sección 18 del SNTSS, Ricardo Hernández Carmona, dijo que no se trata de chantajes sino de que se respete la asignación de plazas que ya estaba aprobada y quedó asentada desde 2018.
Sobre la exigencia de la salida de Andrea González, manifestó que la titular de la clínica no cubre el perfil que se estableció jurídicamente para ocupar el cargo.