El Tren Interurbano México-Toluca requiere una ampliación presupuestal de 9 mil millones de pesos para este año, pues de otra manera se pone en riesgo su conclusión para 2021, manifestó Manuel Gómez Parra, director general de Transporte Ferroviario de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

La petición de más recursos públicos se da en el contexto del recorte en todas las dependencias anunciado por el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, y ratificado por el subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera.

Gómez Parra expuso a reporteros que este año hay asignados 3 mil millones de pesos para dicha construcción, que conectará al estado de México con la capital del país, pero continuar con el ritmo de la obra, apuntó, requiere que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) apruebe una ampliación de 9 mil millones de pesos antes de que termine abril.

Se están efectuando reuniones con la SHCP para ver la fuente del financiamiento de los recursos faltantes y el calendario para el dinero que estamos requiriendo. Hoy por hoy no nos han confirmado que lo van a asignar, manifestó luego de su participación en el congreso Exporail 2019.

Sobrecosto de 80 por ciento

Detalló que, a la fecha, uno de los proyectos que el ex presidente Enrique Peña Nieto prometió entregar antes de que terminara su sexenio suma 85 por ciento de avance global y acumula un sobrecosto de 80 por ciento de los 42 mil millones de pesos contemplados en 2014.

Gómez Parra añadió que se han desembolsado 4 mil 400 millones de pesos para liberar el derecho de vía. Las mesas de trabajo con los pobladores se mantienen también con representantes de la Secretaría de Gobernación, el estado de México y la Secretaría de Bienestar para pagar a los dueños de los terrenos por donde pasará el tren.

Sin embargo, recalcó que el tema se resume a recursos financieros. Dependemos mucho del asunto presupuestal. Creo que ahora el mayor problema es presupuestal, prácticamente todos los tramos están controlados, aseguró.

Destacó que la meta es que el tren llegue a Santa Fe en 2020. Dependiendo de los recursos que se asignen el año próximo, el tren llegaría a Observatorio en 2021.

Aclaró que la inversión privada en la obra podría ser mediante un concesionario, que se espera designar a más tardar este año.

El gobierno ha estado analizando diferentes opciones y aún no se decide cómo designarlo, puntualizó. Una opción es la licitación, la otra es que a través del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos se hagan contrataciones de operación y mantenimiento.