Demasiadas expectativas sobre los documentos
A pesar de instalaciones y equipos nuevos, hoy es “un elefante blanco”, asegura su titular
Martes 26 de marzo de 2019, p. 13
La apertura pública de los expedientes elaborados por el desaparecido Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) va a requerir que el gobierno federal otorgue al Archivo General de la Nación (AGN) más del doble de los recursos económicos con que cuenta hasta ahora, pues de lo contrario dicha tarea se vería seriamente comprometida.
Así lo advirtió el director del máximo recinto de la archivística mexicana, Carlos Enrique Ruiz Abreu, quien señaló que a pesar de su trascendencia, el AGN es en estos momentos un elefante blanco que no cumple a cabalidad con las labores para las cuales fue creado, situación que podría volverse aún peor con toda la carga de trabajo que implicará ordenar y mostrar los expedientes del Cisen.
En entrevista con La Jornada, Ruiz consideró que la apertura de los mencionados archivos –ordenada por López Obrador a finales de febrero– está generando expectativas demasiado altas entre el público, ya que en muchas ocasiones la vigilancia del Estado sobre diferentes personas no era tan profunda, aunque admite que era suficiente para fabricarle
a los sujetos espiados delitos que no habían cometido.
–¿En qué condiciones está el AGN para una labor como la que viene con los archivos del Cisen?
–En esta nueva administración, nos dejaron un edificio nuevo, de primer mundo, donde están los acervos y unos laboratorios excelentes, con tecnología avanzada, escáneres y laboratorios para restaurar papel y encuadernar libros antiguos.
“Donde al AGN nos lo encontramos completamente abandonado es al interior, en los proyectos, en lo sustantivo, que es organizar, clasificar y describir los expedientes, y dar un mejor servicio. Nos encontramos con un archivo prácticamente cerrado a la investigación.
“Además –agrega– hay un rezago de 4 mil 971 bajas documentales. ¡Es muchísimo! Nunca en la historia de este lugar se había dado un rezago tan grande. Prácticamente no se hacían catálogos y la descripción de documentos es casi nula.”
Mismo gasto que en 2018
–Suena a que casi tiene que reconstruir el AGN…
–Casi. Es importante el edificio nuevo y los laboratorios, pero a final de cuentas podemos decir que es un elefante blanco, si no tenemos personal. El archivo no cuenta con un presupuesto adecuado; nos dieron el del año pasado, que es de 78 millones de pesos, y estamos pidiendo una ampliación presupuestal para llegar a 178 millones.
–Sin esa ampliación, ¿la labor del AGN se vería comprometida, sobre todo de cara a lo del Cisen?
–Sí, exacto, muy comprometida. Necesitamos fondos y personal para atender a todos los investigadores, y más con esto del Cisen. Si ya teníamos una gran carga de trabajo y había poco personal, ahora es peor, porque (con el anuncio de López Obrador) vinieron muchísimos periodistas y estamos saturados. El elefante blanco sí es muy bonito, muy moderno, muy de primer mundo, pero sin funcionalidad.
–¿Cuántas personas trabajan en el AGN y cuántas van a necesitar?
–En este momento trabajamos aquí 219 personas, y para poder trabajar al cien por ciento necesitamos unas 20 o 30 más. Ya estamos en pláticas con la Secretaría de Hacienda para lo del presupuesto, y afortunadamente hay sensibilidad.
–¿Cómo serán los lineamientos para ordenar todo el material de los archivos del Cisen y que nada quede fuera?
–Los lineamientos ya los tengo que emitir esta semana, porque eran 30 días después del acuerdo firmado por López Obrador. Se tienen que distribuir entre todas las dependencias que pueden tener archivos involucrados, y son 180 días para que nos envíen el material para acá.
–¿Cree que hay expectativas exageradas o desmesuradas respecto de lo que podemos ver?
–Sí, creo que sí se espera demasiado. El archivo del Cisen es muy importante para nosotros, porque podemos descubrir algunas atrocidades de gobiernos anteriores, pero hay demasiada expectativa. En algunos expedientes que he visto hay mucha paja: reuniones donde participó alguien y no pasó nada, aunque sirvió para mucha fabricación de delitos, para decir que eran rojos
o de tal o cual partido.
–¿Es así porque el Estado no espiaba a ese nivel o porque sí lo hizo pero no lo podemos ver porque esos archivos están en otro lado?
–No, lo que se hizo aquí fue más bien superficial. En un archivo de 100 fojas puedes encontrar algunas cosas más delicadas o finas, pero no es así en todo lo demás.