Jueves 21 de marzo de 2019, p. 8
Las familias desplazadas de manera forzada de comunidades indígenas de Guerrero señalaron que no dejarán el plantón instalado en Palacio Nacional hasta que sean atendidas, ya que, dicen, la Secretaría de Gobernación (SG) no les ha dado respuesta y han aplazado las reuniones en las que serían escuchadas.
Mientras el grupo originario del municipio de Leonardo Bravo pide un operativo del Ejército para garantizar su regreso, pobladores de Tlaltempanapa, en Zitlala, ya no buscan regresar pues temen por su seguridad y piden una reubicación debido a que grupos armados se apoderaron de sus viviendas.
Los desplazados ofrecieron ayer una conferencia de prensa en el plantón que mantienen desde hace un mes en la entrada principal de Palacio Nacional, donde viven en casas de campaña y bajo lonas colgadas de los barrotes de las ventanas de este sitio.
Aseguran que a pesar de no tener las condiciones adecuadas, están mejor que en Guerrero, ya que tuvieron que dejar sus hogares desde hace cuatro meses por la presencia de grupos del crimen organizado.
¿Aquí qué nos van a dar? Allá tenemos nuestras hectáreas, hay quienes tienen 20, otros cinco; somos campesinos. Tenemos nuestra vida hecha allá, pero vemos que la situación se va a alargar y van a pasar años para podernos dar solución, porque no le quieren entrar al problema
, indicó Crescencio Pacheco, habitante de Leonardo Bravo, quien pide a la SG un operativo que les permita regresar a sus viviendas.
En cambio, para Joaquina Cantor, de la comunidad de Tlaltempanapa, en el municipio de Zitlala, la prioridad no es regresar ya que temen por su seguridad y piden una reubicación, así como ayuda para los muebles básicos de sus hogares.
Otros grupo anunció que durante esta semana dejará el plantón para ir a Acapulco y presionar al gobierno estatal.