Las escuelas de prescolar en México enfrentan graves carencias de infraestructura, equipamiento y materiales pedagógicos, por lo que no se cumple con las condiciones mínimas básicas de operación y funcionamiento, advierte el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), lo que calificó como altamente preocupante.

Los resultados de la Evaluación de Condiciones Básicas para la Enseñanza y el Aprendizaje (ECEA) en Educación Prescolar, aplicado a 4 mil 171 docentes y mil 595 directores de 2 mil 141 escuelas en todo el país, revelan que los alumnos carecen de servicios básicos, como agua potable, 40 por ciento no cuenta con agua entubada todos los días (32 mil 524 escuelas), y 16.5 por ciento no dispone de energía eléctrica (en 13 mil 379) planteles y en 18.7 por ciento está en mal estado, mientras que 3 por ciento (6 mil 558) no cuentan con drenaje.

En el caso de las escuelas indígenas y comunitarias las carencias se agravan. El INEE señaló que 64 por ciento no tiene agua entubada todos los días, dos de cada 10 planteles no cuentan con sanitarios; 65 por ciento no dispone de área de juegos; 65 por ciento no tiene mobiliario completo para sus estudiantes y en 60 por ciento de las escuelas, tampoco cuentan con este apoyo para los docentes.

En todos los tipos de plantel se estima que al menos 7 por ciento de los prescolares (6 mil 300) carecen de sanitarios y en dos de cada 10 planteles no están separados por sexo. En cuanto a los problemas de mantenimiento, Raquel Ahuja, directora general de Evaluación de la Oferta Educativa del INEE, destacó que 28.7 por ciento de los niños tienen techos en mal estado y en 2.1 por ciento no tienen. Al menos 5.8 por ciento de las escuelas de prescolar carece de vidrios y en 18.7 por ciento están en mal estado.

Además hacen falta materiales didácticos y de apoyo como acervos bibliográficos, libros de trabajo, computadoras e Internet, pues 63 por ciento de todos los niños de este nivel carece de este servicio.

Las áreas de juego brillan por su ausencia, pues 34.5 por ciento de los planteles no tiene un lugar para que los alumnos puedan jugar y en 18.5 por ciento están en malas condiciones. En la mitad de los prescolares no se cuenta con rutas de evacuación y seis de cada 10 carecen de un plan de protección civil.

A esto se suma que en nueve de cada 10 escuelas los padres de familia deben hacer donaciones económicas, en especie o con trabajo para garantizar el mantenimiento básico del plantel, adquirir material didáctico e incluso pagar servicios docentes y de limpieza. En 37.4 por ciento de las escuelas los recursos se destinan al pago de servicios básicos como agua, luz, predial, renta del inmueble y recolección de basura, y en 91.1 por ciento para compra de materiales de higiene y limpieza.

Con una matrícula de 4.9 millones de alumnos y 90 mil planteles en todo el territorio nacional, la educación prescolar enfrenta déficit, en algunos casos graves, para garantizar condiciones mínimas para ofrecer una educación prescolar de calidad, reconoció Sylvia Schmelkes del Valle, consejera y ex presidenta del INEE, quien agregó que las mayores desventajas las presentan las escuelas en condiciones de mayor pobreza, sobre todo, ubicadas en zonas rurales.