Viernes 15 de marzo de 2019, p. 23
Río de Janeiro. En el aniversario del asesinato de la concejal brasileña Marielle Franco se dio a conocer este jueves un fotografía del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, con el ex policía Élcio Queiroz, acusado de la muerte de la también activista, informó el diario británico The Guardian.
Además, un hijo de Bolsonaro mantuvo una relación con la hija de Ronnie Lessa, el otro inculpado por el asesinato de la defensora de los derechos humanos, quien denunció el abuso policiaco en Río de Janeiro y fue asesinada, al igual que su chofer, el 14 de marzo de 2018.
Lessa vivía en el mismo complejo residencial que Bolsonaro antes de que éste se mudara a la capital para perseguir su candidatura presidencial, confirmó la policía.
Según la prensa brasileña, Lessa es un asesino a sueldo que perdió una pierna en un ataque con bomba en 2009 y quien ha hecho fortuna como miembro de un grupo delictivo conocido como El escritorio del crimen. También es sospechoso de tráficar con armas.
Humberto Costa, senador del izquierdista Partido de los Trabajadores, dijo que estas relaciones entre paramilitares y el presidente deben ser explicadas
.
Bolsonaro negó conocer a Queiroz y justificó las declaraciones en favor de las milicias brasileñas surgidas en 2000 al decir que entonces la gente las apoyaba
.
Juliano Medeiros, presidente del Partido Socialismo y Libertad, al que pertenecía Marielle Franco, señaló que “Bolsonaro ha fallado al explicar su relación con las pandillas paramilitares de Río de Janeiro.
Es alarmante pensar en la hipótesis de que Brasil es gobernada por una familia relacionada con esta clase de organización criminal
, añadió Medeiros.
Fiscales dijeron que la foto de Bolsonaro con Queiroz es de 2011, antes de que éste fuera expulsado de la policía, y que se trataba de una coincidencia
.
En tanto, amigos y familiares de las víctimas de una matanza en la escuela pública Profesor Raul Brasil asistieron a un entierro colectivo celebrado en Suzano, un suburbio de Sao Paulo, mientras las autoridades aún tratan de comprender el móvil de los dos ex alumnos que atacaron a personal escolar y a estudiantes de entre 15 y 17 años con un revólver, ballestas y hachas. Previamente habían disparado al tío de uno de ellos, dueño de una tienda de autos, quien falleció en el hospital.
Los cuerpos de cuatro de los jóvenes y de las dos funcionarias escolares, de 38 y 59 años, fueron velados en un pabellón convertido en enorme funeraria. Otro estudiante y el tío de uno de los atacantes fueron despedidos en otro lugar.
Los asesinos fueron enterrados en la intimidad y con refuerzo policial en las ceremonias, según informaron medios locales.
El video de una de las cámaras de seguridad de la escuela difundido por la cadena Band mostró escenas en las que se ve cómo uno de los asesinos ingresa al edificio portando una gorra, saca un revólver y comienza a disparar a un grupo de alumnos que conversaban en la entrada y continúa su mortal trayecto hacia el patio. Enseguida llega el segundo y ataca con un hacha a los heridos que están en el suelo.
Según Tv Globo los atacantes planearon el crimen durante un año.