Las negociaciones de salarios contractuales se saldaron en 2018 con un incremento promedio de 4.9 por ciento, prácticamente en línea con la inflación registrada en ese ejercicio, que fue de 4.83 por ciento, de acuerdo con datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

El año pasado, los trabajadores que recibieron un incremento a partir de una negociación contractual sumaron 2 millones 358 mil 54, cantidad que superó en 48 mil 92 a la del ejercicio previo y que representó la mayor cifra en la historia del indicador, que comenzó a ser recopilado en 1988.

Debido a que el aumento cerró en línea con la inflación, no hubo una pérdida real del salario, una diferencia que contrasta con el resultado de 2017, cuando el poder adquisitivo cedió 1.49 por ciento, como resultado del impacto acumulado que tuvo la liberación de los precios de las gasolinas en ese año.

En 2018, el incremento al salario promedio fue impulsado principalmente por las empresas privadas, en las que un millón 544 mil 359 empleados obtuvieron un incremento promedio de 5.7 por ciento; mientras, el salario de 813 mil 695 trabajadores del sector público aumentó 3.4 por ciento, de acuerdo con información de la SHCP.

En particular, durante el último mes del año, 43 mil 788 empleados recibieron un aumento; de ellos, 43 mil 758 laboran en empresas privadas. Si bien, en ambos grupos las revisiones se redujeron en diciembre, un mes atrás llegaron a 8 mil 392 en el sector público, mientras en las empresas privadas cerraron en 83 mil 630 trabajadores involucradas en revisiones salariales.

Durante diciembre, de 475 revisiones salariales sólo una se dio en el sector público, mientras en noviembre las empresas públicas realizaron 22, uno de los datos más altos en el año tras el de mayo.

En 22 de los 32 estados hubo incrementos mayores o iguales al promedio ponderado por trabajador a escala nacional. Sin embargo, en Baja California Sur, Nayarit y Zacatecas no hubo cambios en incrementos salariales. Mientras en Nuevo León, Baja California, Morelos, Oaxaca, Aguascalientes, Sinaloa y Chiapas los incrementos salariales se ubicaron por debajo del promedio nacional.