Al menos dos personas resultaron heridas durante la protesta que realizaron ayer frente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) contra los altos sueldos de funcionarios del Poder Judicial de la Federación (PJF), cuando decenas de manifestantes se enfrentaron con policías de Ciudad de México que les impidieron cerrar los accesos del edificio.

Temprano, la Secretaría de Seguridad Pública capitalina instaló un dispositivo de seguridad en las inmediaciones de la SCJN sin portar cascos, toletes ni escudos.

La jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, aseveró que el operativo policiaco se realizó por solicitud de la Suprema Corte para facilitar el ingreso y la salida de ministros. Explicó que se recibió una petición por escrito, la cual fue atendida porque la Constitución establece que el Gobierno de Ciudad de México es el encargado de brindar seguridad a las instituciones federales y que los policías desarrollaron una labor preventiva.

El enfrentamiento comenzó horas antes de que se eligiera al nuevo presidente de la SCJN, cuando los manifestantes intentaron romper el cerco policiaco para ingresar por la calle Venustiano Carranza, que fue cerrada de manera parcial por mujeres policías. Hubo varios golpeados por ambos bandos.

Gregorio Muñoz, del Movimiento del Pueblo Yo Soy Tu Patrón, y el activista Arturo Calva señalaron que siete personas fueron agredidas, entre ellas Abraham Rivera, Felipe Ortiz Hernández, Alfredo Quiroz, Arturo Calva, Itza Diaz y David N.

Desde el 12 de diciembre pasado, unas 50 personas, la mayoría de la tercera edad, clausuraron de manera simbólica el acceso principal de la SCJN y se alternan para impedir el acceso de trabajadores y funcionarios. Exigen que los ministros homologuen sus salarios a lo que dicta de la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos, que ordena que ningún funcionario podrá ganar más que el presidente Andrés Manuel Lóez Obrador, quien se fijo un monto de 108 mil pesos mensuales.

Los inconformes instalaron una carpa donde preparan sus alimentos, así como casas de campaña para dormir. También tapizaron la pared del recinto con pancartas que dicen: Quienes no tengan dignidad, moral, lealtad al pueblo de México, ¡Fuera!, Cuando los pueblos tomen conciencia y abran los ojos, ese día se convertirán en el terror de los ricos y corruptos y . No al tráfico de influencias. Exigimos nuevos jueces y magistrados. Nadie es indispensable y todos somos remplazables.

Aseguraron que han recolectado más de 600 mil firmas ciudadanas para demandar la renuncia de los togados. Calva Pérez explicó que la madrugada de ayer llegaron unos 10 camiones con uniformados y tres más tipo rinoceronte para intentar desalojarlos. Explicó que luego de la gresca se reunieron con funcionarios de la Secretaría de Gobierno para denunciar los hechos y solicitar una mesa de diálogo.