Jueves 3 de enero de 2019, p. 16
La reducción de la tasa del impuesto al valor agregado (IVA) de 16 a 8 por ciento en la frontera norte sí beneficiará directamente a los consumidores en la compra de todo tipo de mercancías, como alimentos, aparatos electrónicos, ropa y calzado, pero falta conocer las reglas de operación que se difundirán el próximo lunes 7 de enero, aseveró José Manuel López Campos, dirigente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo.
Sin embargo, especialistas consideraron esos beneficios no serán inmediatos ni generalizados para todas las empresas, pese a que el decreto de estímulos fiscales para la región fronteriza norte entró en vigor formalmente desde el primero de enero de 2019.
Sostuvieron que ha habido mucha confusión en el tema y aunque en los discursos oficiales se habló de reducciones en la tasa del IVA de 16 a 8 por ciento y de 30 a 20 por ciento en la de ISR, esto quedó consignado como créditos fiscales
en el decreto presidencial publicado el pasado 31 de diciembre en el Diario Oficial de la Federación.
La Constitución y las leyes secundarias impiden al Presidente de la República modificar las tasas de impuestos, pero sí le permiten conceder estímulos o beneficios fiscales, entonces por razones legales y constitucionales de alguna manera se disfraza ese crédito para ISR e IVA como una reducción de tasa para que pudiera ser autorizado mediante decreto, en lugar tener que modificar leyes
, consideró Reginaldo Esquer Félix, presidente de la comisión nacional fiscal de la Confederación Patronal de la República Mexicana.
A su vez, el dirigente de la Concanaco sostuvo que con las reglas de operación se podrá definir cuántas empresas se sumarán a esta medida que será temporal, optativa y de la que quedarán excluidos sectores que ya tienen beneficios fiscales. Insistió que habrá un beneficio inmediato y general para los consumidores y para las empresas de todo tipo de consumibles
que enfrentan la competencia de sus homólogos de Estados Unidos.
En cambio, Jorge Ayax Cabello, auditor financiero del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, advirtió que hay una imposibilidad práctica para llevar a cabo esta reducción del IVA, porque cuando la factura electrónica que permite el Servicio de Administración Tributaria (SAT) no posibilita una tasa diferente de 16 por ciento. Hasta ahora es imposible facturar con 8 por ciento del IVA. En el SAT siguen de vacaciones y no existe ninguna plataforma o formato donde las empresas que quieran obtener dichos beneficios puedan registrarse o dar aviso
.
Incluso el especialista no descartó el riesgo que empresas obtengan dicho beneficio fiscal pero no lo trasladen a sus clientes y sólo retiqueten sus productos, elevando el precio, pero simulando que el IVA que cobran es de sólo 8 por ciento.