Jueves 27 de diciembre de 2018, p. 21
La Paz. La huelga de hambre de líderes civiles de cinco ciudades de Bolivia en rechazo a otra postulación a la presidencia de Evo Morales, se debilitó este miércoles tras la decisión de dirigentes de tres regiones de suspenderla luego de dos semanas.
El ayuno voluntario de activistas detractores de Evo empezó hace dos semanas en cinco de las nueve principales ciudades del país, y en un momento llegó a incluir a unas 150 personas. En Santa Cruz, Tarija y La Paz la protesta finalizó entre el lunes y este miércoles, pero persiste en Sucre y Cochabamba con un grupo reducido de inconformes.
“Se ha cumplido el objetivo de sensibilizar a la población, y se ha logrado porque la gente quiere que se respete la democracia", afirmó Víctor Hugo Valda, uno de los activistas que estuvo en huelga de hambre en Santa Cruz.
Empero, anunció que las medidas se radicalizarán
a principios de enero próximo, pues argumenró que Evo Morales –en el poder desde 2006– atenta contra la democracia con una tercera candidatura consecutiva para el periodo 2020-2025, desconociendo el resultado de un referendo de 2016 que rechazó una postulación.
El oficialismo responde de manera frecuente que en noviembre de 2017 el Tribunal Constitucional lo habilitó nuevamente, con el argumento de que su postulación es un derecho humano.
La protesta, que ya no tiene la fuerza del principio, fue criticada por el ministro de Gobierno, Carlos Romero, quien señaló que los huelguistas no generan propuestas para un mejor país.
“Los opositores utilizan pretextos como el del respeto al referendo, pero no han generado ninguna propuesta programática alternativa, sólo gritan: ‘Bolivia dijo no’, y así parece que la oposición se encuentra en el pasado”, concluyó el funcionario.