Investigadores de la UNAM buscan generar patrones basados en la población mexicana
Domingo 23 de diciembre de 2018, p. 30
La odontología forense puede ofrecer información inequívoca para la identificación de cuerpos. Y aunque en el país ya hay trabajos al respecto en población mexicana, los protocolos oficiales de instituciones gubernamentales todavía utilizan referencias internacionales. Por ello, investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México buscan generar estándares basados en los mexicanos.
Ivet Gil-Chavarría y Mirsha Quinto, responsables del Laboratorio de Antropología y Odontología Forense de la Facultad de Medicina, trabajan en conformar la Colección Odontológica Nacional.
En promedio, la dentadura humana tiene 32 piezas. Las diferentes características morfológicas y métricas de cada uno –más los aspectos adquiridos (brackets, amalgamas, endodoncia y pigmentación, entre otras) hacen que la probabilidad de que haya dos dentaduras idénticas sea prácticamente nula. La cantidad de combinaciones de patrones dentales posibles es inmensa; incluso, la dentadura de cada gemelo presenta diferencias con respecto a la de su par, de acuerdo con información de la universidad.
En condiciones ideales, los análisis morfológico y morfométrico de dientes permiten estimar el sexo, edad y ancestría (afinidad biológica a un tipo de población) de un individuo, datos que son requeridos en una investigación forense.
La Colección Odontológica Nacional está dividida en tres apartados principales: dientes extraídos por algún tratamiento y donados por pacientes, modelos dentales de yeso utilizados para tratamientos de ortodoncia y digitalizados en 3D y ortopantomografías. Como parte de ella, los investigadores desarrollan el proyecto Determinación de estándares de identificación humana a partir de muestras dentales para uso forense en México
, de la cual se derivan tres líneas principales.
La primera, la estimación del sexo: a partir de registros métricos de las coronas de los dientes, basados en caras oclusales y cervicales, se realizan patrones de referencia para la estimación del sexo.
La segunda, es estimación de la edad: implica medir la transparencia de la dentina radicular y, en radiografías, las proporciones del diente. Sin embargo, estos métodos no son tan precisos. Por ello, los universitarios trabajan en una técnica llamada análisis de carbono 14 para generar tablas de referencia acordes con la población de México.
Y la tercera línea es estimación de la ancestría: Gil-Chavarría y sus compañeros del LAOF proyectan el análisis de caracteres no métricos en dientes de poblaciones contemporáneas, para inferir la dinámica de población y mestizaje que hay en México.
No obstante, en los protocolos de las procuradurías del país, la ancestría ni siquiera está considerada como uno de los objetivos de la odontología; en la mayor parte de los casos es una tarea del área antropológica. En un contexto de identificación, en el que únicamente se dispone de dientes, se tendría que obtener de éstos la mayor información posible
, aseveró Gil-Chavarría.