En la más reciente revisión que hizo a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró pagos superiores a los autorizados a académicos, falta de documentación sobre el pago de nóminas y plazas de más. Por ello determinó la probable recuperación de 16 millones 743 mil 574 pesos, de acuerdo con una auditoría de cumplimiento financiero sobre prestaciones, estímulos y adquisición de bienes.

El objetivo de la auditoría fue fiscalizar la gestión financiera para verificar si el presupuesto asignado al capítulo mil del presupuesto, servicios personales, y 5 mil, bienes muebles, inmuebles e intangibles, se ejerció y registró conforme a los montos aprobados y de acuerdo con las disposiciones legales aplicables.

Para la revisión se seleccionaron 513 millones 643 mil pesos ejercidos por la UNAM en las áreas mencionadas en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán y en las direcciones generales de Bibliotecas, de Televisión Universitaria y del Instituto de Física.

Graves irregularidades

La auditoría evidenció la falta de documentación para acreditar una diferencia no aclarada de 13 millones 412 mil pesos que resultó de comparar las cifras reportadas por la que resultó del comparativo de las cifras al cierre 2017 por la administración universitaria con los registros de las nóminas de la FES Acatlán.

Encontró pagos adicionales por un millón 975 mil pesos a 100 empleados y estímulos adicionales otorgados a 528 académicos por un millón 314 mil pesos que no corresponden a los montos establecidos en los tabuladores de las convocatorias del Programa de Estímulos a la Productividad y al Rendimiento del Personal Académico de Asignatura”.

Al comparar las plazas autorizadas en la plantilla contra las registradas en la nómina de la FES Acatlán se determinó que se ocuparon entre una y siete plazas de más.

También halló la falta de aplicación de penas convencionales por 42 mil pesos por el atraso en la entrega de bienes a la UNAM.

Por ello, la ASF hizo 19 recomendaciones a la administración universitaria, promovió cinco acciones de responsabilidad administrativa sancionatoria y cuatro pliegos de observaciones.

El dictamen concluye que la UNAM, en términos generales, cumplió con las disposiciones legales y normativas que son aplicables en la materia, excepto en los aspectos mencionados.