Con el inicio de las fiestas decembrinas también comienza un periodo donde la convivencia puede propiciar excesos en la ingesta de alimentos y alcohol, lo que puede propiciar problemas a la salud, de acuerdo con Humberto Astiazarán García, investigador del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo.

El especialista indicó que consumir alimentos que contengan altas cantidades de calorías, además de ocasionar incremento de peso, puede detonar o agravar determinados padecimientos.

El menú de las tradicionales posadas, señaló, no suele caracterizarse por incluir platillos balanceados, ya que, por ejemplo, un tamal de carne puede representar una cuarta de la ingesta calórica recomendada por día.

Exponer nuestra salud a altos niveles de azúcar, alcohol o grasas saturadas, puede conducir al desarrollo de obesidad, diabetes, cardiopatías o enfermedades cerebrovasculares, comentó mediante un comunicado de dicho centro de investigación.

Asimismo, beber alcohol en exceso, además del riesgo inmediato que representa en la pérdida de nuestra capacidad de reacción (equilibrio o razonamiento), puede derivar o acentuar cuadros clínicos de gastritis, úlceras, intoxicación o enfermedad hepática.

El experto en patología experimental recomendó vigilar la dieta permanentemente y no descuidar la actividad física, procurando no exponerse a las bajas temperaturas de esta temporada, y proteger particularmente a infantes y adultos mayores.

Destacó que una estrategia efectiva para cuidar nuestra salud durante las fiestas es tratar de que el platillo que ingerimos contenga una buena porción de verduras y consumir diversas frutas, y sí se sabe que el banquete estará conformado por platillos no tan saludables, evitar que las demás comidas del mismo día sean similares.

Astiazarán García subrayó que durante esta temporada es muy importante que, si se padece alguna enfermedad, no se descuide la toma de medicamentos. Con esta y otras medidas, todos pasaremos una feliz Navidad y un agradable inicio de año nuevo, expresó.