Un grupo de inversionistas que representa a más de la mitad de los tenedores de bonos emitidos para financiar la construcción del ahora suspendido Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) aseguró que no está en condición de aceptar la oferta de recompra y cambio a las condiciones contractuales planteadas la semana pasada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

El 3 de diciembre pasado el gobierno mexicano hizo una oferta en Nueva York para una recompra de mil 800 millones de dólares, poco menos de una tercera parte de los 6 mil millones que suman las cuatro emisiones de bonos hechas por el gobierno anterior para la construcción del NAIM. Esa obra fue suspendida por el ahora presidente López Obrador, después de una consulta popular realizada a finales de octubre.

En un comunicado, tenedores de bonos representados por el despacho legal Hogan Lovells informaron que junto con otros propietarios de éstos, en contacto con ese bufete, superan 50 por ciento en monto de al menos una serie de bonos y también 50 por ciento del monto principal del total de valores MexCAT, como se llama el fideicomiso constituido para la emisión de los papeles.

Un grupo de inversionistas que representaba a poco más de la mitad de los tenedores de una serie de bonos rechazó el martes pasado la oferta de recompra hecha por el gobierno mexicano, que plantea también un cambio en las condiciones contractuales, dado que la fuente de pago de esos instrumentos era el ingreso por tarifa de uso de aeropuerto (TUA) de Texcoco.

Ayer, inversionistas que tienen más de la mitad de los 6 mil millones de dólares en bonos comunicaron que no están en condiciones de aceptar la oferta planteada por el gobierno mexicano de recomprar mil 800 millones de dólares y modificar las condiciones contractuales para que la fuente de pago ya no sea la TUA de Texcoco. Sin embargo, el comunicado deja abierta la posibilidad de seguir negociando.

Hasta ahora la construcción del NAIM sigue oficialmente activa, aunque las obras que se realizan son al mínimo, dado que cancelarla de manera oficial implicaría acciones legales de los tenedores de esos papales, que podrían argumentar un evento de incumplimiento, lo que, de ocurrir, podría afectar posiblemente el precio de otros bonos emitidos por el Estado mexicano.

El grupo de tenedores de los títulos emitidos para financiar el NAIM es un conjunto de grandes instituciones internacionales de inversión, que no puede respaldar la oferta de compra y la solicitud de consentimiento de MexCAT en su forma actual, como se señala en el comunicado de prensa de Hogan Lovells del 4 de diciembre de 2018.

La firma jurídica internacional Hogan Lovells, que incluye a los socios Ron Silverman (Nueva York) y Federico de Noriega (Ciudad de México), ha sido contratada como asesora legal del grupo de tenedores de bonos de MexCAT, que en conjunto poseen poco más de 50 por ciento de un total de 6 mil millones.

Entre los inversionistas que mantienen una tenencia de bonos se encuentran firmas y fondos de inversión como Pimco, BlackRock, Credit Suisse, HSBC, Schroder y UBS.

Actualmente el gobierno tiene los fondos suficientes para el pago de la oferta que se encuentran en un fideicomiso de construcción, en el cual existen alrededor de 5 mil millones de dólares.