Bogotá. Miles de estudiantes y profesores de universidades públicas de Colombia realizaron este jueves la novena jornada de marchas en todo el país, en el contexto de un paro estudiantil que lleva más de 50 días y mediante el cual piden al gobierno central más recursos para la educación superior.

Esta es la novena marcha de universitarios y seguirán más movilizaciones; vamos a presionar para que el gobierno cambie su nula voluntad política para aumentar los recursos a la educación, señaló en Twitter la Asociación Colombiana de Representantes Estudiantiles de la Educación Superior (Acrees).

De acuerdo con los estudiantes, aunque se han dado avances importantes en la mesa de negociación con el gobierno, sobre la base presupuestal de las universidades no se ha concretado una propuesta satisfactoria, por lo que continuarán con nuevas marchas hasta que se destine el dinero necesario para el funcionamiento de las 32 universidades públicas del país.

En días pasados, el gobierno de Iván Duque adicionó 720 millones de dólares para el sector en los próximos cuatro años, lo cual fue concertado con los rectores de las universidades públicas, pero que fue considerado insuficiente por los estudiantes, que exigen 157 millones de dólares más.

Según el Sistema Universitario Estatal (SUE), la educación superior pública de Colombia presenta un déficit de unos mil 67 millones dólares en funcionamiento y de unos 5 mil millones de dólares en infraestructura.

Los estudiantes sostienen que hay recursos del presupuesto general sin comprometer que ascienden a 18 mil millones de dólares, y si sólo se toma uno por ciento se resolvería el problema de inmediato para las universidades públicas del país.

Plata sí hay, lo que no hay es voluntad del gobierno, aseguran los estudiantes en redes sociales.

En las principales ciudades del país se organizaron marchas este jueves, a las cuales se sumaron organizaciones como la Central Unitaria de Trabajadores, la Confederación General del Trabajo y la Confederación de Trabajadores de Colombia, que a su vez protestan contra la reforma tributaria que impulsa el gobierno en el Congreso y que, consideran, afectará todavía más a la clase trabajadora.