La distribución de la minuta de Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República entre los diputados de la Comisión de Justicia propició la reacción negativa del PAN, que en voz de Juan Carlos Romero Hicks reprochó la ausencia de diálogo desde Morena y anunció que su partido sólo votará el documento enviado por el Senado una vez que se modifique de fondo el artículo 102 de la Constitución, referente a la independencia del fiscal respecto del Ejecutivo.

Por la noche, la comisión se reunió en pleno con la finalidad de aprobar la minuta objetada por PAN y PRD. Los diputados de Morena aprobaron en sus términos –sin modificaciones– el documento con 16 votos en favor y seis en contra.

No obstante, diputados de PAN, PRI, MC y PRD reservaron los 76 artículos de que consta la minuta. Es decir, hay objeción para todo, cuando el propósito de las críticas prianistas se circunscribían al artículo 102 de la Constitución.

Se espera que este jueves se enliste en primera lectura la minuta para que sea discutido en el pleno el martes próximo.

El panorama es poco halagüeño porque requiere de dos terceras partes de la votación total. Sólo podría aprobarse si el PRI otorga sus votos a Morena. Sin embargo, los diputados priístas señalaron que la reforma al artículo 102 también es uno de sus irreductibles.

En San Lázaro es evidente que tanto PAN como PRI han colocado sus piezas para forzar la aprobación de las iniciativas constitucionales que promueve Morena, con la imposición de candados a la intención presidencial de someter a consulta popular su estancia en el poder.

Tal es el caso de la minuta acerca de la Fiscalía General. Ésta se encuentra en proceso dictaminación en la Comisión de Justicia y se ha convertido en moneda de cambio. Los panistas argumentan que está incompleta e insisten en que su espíritu conlleva la aprobación de lo que peyorativamente se conoce como el fiscal carnal.

Así, sostienen, debería someterse a un cambio de fondo el artículo 102 constitucional, concerniente a las funciones del Ministerio Público. Ese argumento es general y difuso, y conlleva el interés de negociar la aprobación de la minuta a cambio de que no se efectúe la consulta de revocación de mandato presidencial el mismo día de la elección federal intermedia.

El temor fundado de los panistas –y de su aliado coyuntural, el PRI– se sustenta en que para entonces la popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador, además de conducirlo a la ratificación en el cargo, le arrastraría a Morena un apoyo nunca visto. Ahí reside el fondo de la angustia de la oposición.

Así lo expuso Juan Carlos Romero Hicks, quien anunció que el respaldo a la Fiscalía General no lleva el sello del PAN:

El problema de fondo es corregir el artículo 102 de la Constitución y no se está tocando. Si no se cambia el 102, es un maquillaje.