Guillermo Cantú, director general deportivo de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), informó que dicho organismo ya está en busca de un nuevo técnico para la selección varonil Sub-23, que el próximo año iniciará su proceso rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

Con la selección olímpica es un proceso que arrancará a partir de enero y creemos que para la Sub-23 hay que traer un nuevo cuerpo técnico, estamos viendo esa posibilidad y que se tome la decisión, porque tenemos ya estrategas para las otras categorías, aseveró este lunes en breve conferencia de prensa realizada en el Centro de Alto Rendimiento de la FMF.

Asimismo, comentó que a mediados de diciembre se definirá si el entrenador Roberto Medina continuará al frente de la selección femenil mayor, que también buscará su boleto para los Juegos Olímpicos.

Por otro lado, reconoció que el formato del pasado Premundial Sub-20 de la Confederación Norte, Centroamericana y del Caribe de Futbol (Concacaf) no fue el más adecuado, y reveló que la FMF está en pláticas para tratar de modificar el torneo.

El proceso clasificatorio de la Sub-20 nos dio muchas enseñanzas a nosotros y a la Concacaf; el formato no es el ideal, no es bueno para ninguno, se puede mejorar. Entiendo que hay que incluir a la mayor parte de los miembros de la región, pero salir a hacer tantos goles para un partido no es lo mejor para ambos equipos. Nos conviene a todos una mejor competencia, indicó.

Finalmente, el directivo aseguró que este año fue positivo para todas las selecciones nacionales.

“Arrepentido de algo, no. Reconozco que siempre hay margen para mejorar. Ha sido un 2018 como nunca se había vivido, súper intenso en mi caso. Tuvimos Mundial Femenil Sub-17, Mundial mayor, la aventura de traer una Copa del Mundo a México por tercera ocasión y fue todo muy intenso, hemos trabajado mucho.

Tenemos cosas por mejorar, eso siempre va a suceder, pero estoy satisfecho por la dedicación y el aporte de todos los que formamos Selecciones Nacionales. Siempre nos gustaría ganar, pero hay que aprender a vivir con la frustración de no lograr cosas que uno se traza, pero también con el deseo de volver a empezar un nuevo reto, cuando termina otro, expresó.