San Cristóbal De Las Casas, Chis., Familiares y compañeros del periodista Mario Gómez Sánchez, asesinado el 21 de septiembre en Yajalón, exigieron a las autoridades estatales la detención de los presuntos responsables intelectuales para conocer los motivos del crimen que tienen a la prensa a la expectativa.

Durante una protesta realizada este viernes frente al palacio de Gobierno, con sede en Tuxtla Gutiérrez, Henry Berlín Gómez Sánchez, hermano del comunicador, denunció la lentitud de las indagatorias.

Acompañado por unos 20 periodistas dijo que la Fiscalía General del Estado (FGE) está a medias porque realiza muchas indagatorias respecto a los que ya fueron capturados, pero aún no investiga sobre los presuntos asesinos intelectuales.

Señaló que luego del crimen la FGE les proporcionó como medida preventiva, dos policías ministeriales y dos más de seguridad pública, que resultan insuficientes para resguardar a los ocho integrantes de su familia, quienes han sido amenazados por personas no identificadas con mensajes vía teléfonos móviles.

Aseguró que la protección policiaca no garantiza la seguridad de los familiares de Mario porque la situación social en Yajalón es complicada, debido a la presencia del crimen organizado y porque en sus tiempos en esa zona, a partir del año 2000, algunos políticos armaron a todo el pueblo.

También manifestó que el gobierno estatal ha sido omiso o no ha querido cumplir con la entrega de la pensión de 50 mil pesos mensuales para la madre de la víctima, disposición que fue aprobada por el Congreso del estado y publicada en el periódico oficial de la entidad y lamentó que se llegue al cambio de gubernatura sin que cumplan. Hasta ahora no se han entregado los dos meses de pensión, con el argumento de que todavía está en proceso de firma , que falta una firma, que todavía va a salir, abundó.

A la fecha se encuentran detenidos por el homicidio de Gómez Sánchez, Juan David N, El Machaca; Óscar Leyver N, El Zapatudo, y Juan Pablo N, quien vigilaba la vivienda del extinto periodista la tarde en que fue asesinado desde una motocicleta en marcha.

El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) repudió en su momento el asesinato y dio su recomendación para que se trate el caso como crimen a la libertad de prensa.