Tlalquiltenango, Mor., Desde esta entidad gobernada por un político postulado por Morena, el ex futbolista Cuauhtémoc Blanco, el presidente Enrique Peña Nieto deseó éxito a su sucesor, Andrés Manuel López Obrador.

Y dijo tener con el futuro presidente, un punto enorme de coincidencia: queremos tener una mejor nación, de menor pobreza, de menor desigualdad y de mayores oportunidades para los mexicanos.

La administración a punto de concluir, aseguró entonces, ha hecho su contribución a ese objetivo.

Hizo votos por que el próximo gobierno pueda cumplir también la misión que ha hecho frente a los mexicanos, que recibió un amplio respaldo de la gran mayoría de nuestra nación y que (le) deseo el mayor de los éxitos.

Este país –añadió– se ha construido, moldeado, con la suma de esfuerzos, de generaciones y de gobiernos, y cada vez es más grande, más rica y cada vez genera condiciones de mayor bienestar para sus habitantes, y agradeció la confianza recibida.

El presidente Peña realizó esta gira para inaugurar la autopista Siglo XXI y reconocer en esta su última semana de gobierno a la Policía Federal (PF).

Reconoce profesionalismo de la Policía Federal

Y al explicar la ausencia, aquí, del comisionado de la PF, Manelich Castilla –porque se encuentra en Baja California–, el mandatario se refirió al profesionalismo y desempeño de la PF y abordó brevemente el tema migratorio: Cuando tuvimos necesidades y coyunturas que enfrentar en distintos momentos, como la que hoy tenemos en el norte del país, en Tijuana, con la caravana que se ha desplegado hasta esa parte, y donde queremos una migración ordenada y respetuosa del marco legal de nuestro país, ahí ha estado la Policía Federal.

Aprovechó para entregar simbólicamente, mil 500 nuevas patrullas para la PF. En este sexenio fueron en total 3 mil las suministradas a la corporación, dijo.

Además del gobernador Cuauh-témoc Blanco, estuvieron aquí los mandatarios de Guerrero, Héctor Astudillo, y de Puebla, José Antonio Gali. El presidente Peña expuso que la nueva autopista, de casi 62 kilómetros, con un costo de 2 mil 884 millones de pesos y que conectará a estas tres entidades con el centro, Golfo y Pacífico tardó décadas, por no decir siglos en su construcción.

De buen humor y cuando ya está a cuatro días de dejar la Presidencia, Peña Nieto incluso bromeó con un comentario del gobernador Gali, quien dijo haber hecho sólo tres horas con 20 minutos desde Puebla hasta Acapulco. “Se ve que iba a alta velocidad y, afortunadamente, no se encontró a nadie de la PF, porque está hecha para que, más o menos, se recorra (esa distancia) en 3 horas 40 o 45 minutos. Pero le ‘metió’. Muy bien.

Se trata de un importante eje carretero para ampliar la conectividad en el país, dijo, y agregó que ese ha sido uno de los objetivos de su administración.

Y subrayó la decisión de construir 52 autopistas, 49 de las cuales están prácticamente concluidas y tres más a punto de terminarse. Además se hicieron 80 carreteras federales. Con esto, aseguró, la infraestructura carretera tuvo una inversión 46 por ciento superior a lo aplicado en la administración de Felipe Calderón Hinojosa. Porque, insistió, se trata de asegurar que nuestro país se siga consolidando como un destino confiable a las inversiones y se generen empleos.

La de ayer fue una de las ceremonias encabezadas por el presidente Peña más corta de que se tenga registro. Menos de media hora. Y también destacó por su brevedad el discurso del gobernador anfitrión, Cuauhtémoc Blanco, quien sólo agradeció el legado que deja a nuestra población y aseguró estar trabajando para recuperar la paz social de esa entidad.