Piedras Negras, Coah., Migrantes originarios de Honduras y varios países de África llegaron la mañana de este lunes al puente internacional que comunica Piedras Negras con Eagle Pass, Texas, y esperan que las autoridades de Estados Unidos les permitan el ingreso a su territorio para buscar asilo, oportunidades de trabajo o reunirse con sus familiares.

El grupo lo forman unas 60 personas, la mayoría mujeres y niños, que desde hace dos meses se alojan en los albergues para migrantes de Piedras Negras.

No nos han dicho nada. Nosotros sólo esperamos y confiamos en Dios en que nos ayuden. Estamos esperando, venimos en paz, en son de orden y queremos que nos reciban de buena manera. Para mí y mi hijo no hay garantías, ni futuro en mi país, dijo Alejandra Pineda, de 42 años de edad, originaria de Honduras.

La mujer llegó a Piedras Negras hace tres meses acompañada por su hijo de 15 años. En este tiempo han buscado la manera de hablar con autoridades de Estados Unidos para pedir asilo humanitario, pero nadie los atiende.

Alrededor de las nueve de la mañana el grupo de migrantes abandonó los albergues y caminó hasta el puente internacional uno, en donde se instalaron en el acceso peatonal.

Tenemos fe en que nos van a dejar entrar a Estados Unidos. En Honduras no tenemos dinero para irnos, aquí no tenemos en dónde quedarnos, en el albergue en donde estamos ya tenemos que irnos, vivimos un momento muy difícil; confiamos en ellos, de que el corazón se les ablande, expresó.

La mujer está enterada de las caravanas de migrantes centroamericanos que llegaron a Tijuana y del intento de ingreso por la fuerza que hubo el domingo, pero cree que aun en las desesperación de los migrantes debe prevalecer la razón y tranquilidad.

Si han venido caminando muy largo para llegar hasta donde quieren, no es correcto la forma en que están entrando, a la fuerza, porque cuando uno quiere algo lo pide de buenas maneras, no pasando encima de las demás personas, sostuvo.