Martes 27 de noviembre de 2018, p. 33
Guadalajara, Jal., Gerardo Octavio Solís Gómez, ex procurador y ex gobernador interino panista de Jalisco, fue designado por el gobernador electo, Enrique Alfaro Ramírez, próximo fiscal general del estado a pesar de haber recibido de organismos locales, nacionales e internacionales de derechos humanos varias recomendaciones por tortura y tratos degradantes contra detenidos.
En un comunicado, Alfaro Ramírez propuso a Solís Gómez, quien deberá ser aprobado por el Congreso estatal, aunque se prevé que lo ratifiquen los legisladores de mayoría del partido Movimiento Ciudadano (MC), al que pertenece el gobernador electo.
La propuesta fue apoyada por el gobernador priísta Aristóteles Sandoval, quien finaliza su administración el 6 de diciembre y en unos días presentará la postulación a los diputados.
Después de meses de valoración de perfiles y de un inédito ejercicio de la mano del Comité de Participación Social del Sistema Estatal Anticorrupción de Jalisco, he tomado la decisión de presentar al doctor Gerardo Octavio Solís Gómez como el mejor perfil para encabezar la Fiscalía General del Estado
, informó Alfaro.
Gerardo Octavio ha sido procurador general de Justicia del estado, secretario general de Gobierno y gobernador. Confío en su experiencia y compromiso para recuperar la paz y la confianza de los jaliscienses
, destacó Alfaro.
Atropellos desestimados
Como procurador estatal, entre 2001 y 2005, Solís Gómez ameritó un informe especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) por la represión a manifestantes el 28 de mayo de 2004, durante una protesta en una cumbre de jefes de Estado en Guadalajara.
La CNDH pidió sanciones que el gobierno del estado no cumplió. También hubo recomendaciones de Human Rights Watch y Amnistía Internacional, entre otros organismos locales y nacionales.
En sus cuatro años como procurador, Solís Gómez acumuló 31 observaciones de la CNDH, las cuales fueron ignoradas. En 2002 recibió otro aviso, luego de que al menos mil 500 jóvenes que acudieron a una fiesta en Tlajomulco fueron cercados, vejados y una treintena encarcelados y golpeados por órdenes del gobierno estatal.
En lugar de ser sancionado, en 2005 Solís fue nombrado secretario de Gobierno de Jalisco y un año después gobernador interino, tras el nombramiento del panista Francisco Ramírez Acuña como secretario de Gobernación en el naciente gobierno del panista Felipe Calderón Hinojosa.