A pesar de que en días recientes las condiciones del aire no han sido óptimas, miles de vehículos circularon prácticamente a vuelta de rueda en vialidades primarias de la capital, debido a que se realizó el desfile navideño Bolo Fest 2018 la mañana de ayer.

Durante más de siete horas la circulación se vio afectada, sobre todo en zonas aledañas a la avenida Paseo de la Reforma, donde se efectuó el acto al que asistieron miles de familias y que divirtió a los niños, quienes pudieron ver gigantescos muñecos inflables y botargas con las figuras de sus personajes de los dibujos animados de moda.

La caravana estuvo integrada por 17 carros alegóricos, 18 globos gigantes y 18 grupos que realizaron bailes y representaciones; partió a las 9:30 de la mañana de la Estela de Luz, en la zona de Chapultepec, y concluyó en la Glorieta a Colón, en la colonia Tabacalera, alrededor de las 13 horas. Según las autoridades capitalinas el acto convocó a aproximadamente 300 mil espectadores.

Ante las expectativas de asistencia, la Secretaría de Seguridad Pública aplicó un operativo de vigilancia, seguridad y movilidad el cual comenzó el viernes con la colocación de vallas metálicas en varios puntos de la avenida, al costado del carril que se dirige al centro de la ciudad.

Muy temprano 2 mil efectivos –sobre todo de la policía de proximidad y metropolitana, así como de la Subsecretaría de Control de Tránsito– fueron enviados a varios puntos de las alcaldías Miguel Hidalgo y Cuauhtémoc para evitar afectaciones mayores a la población.

Sin embargo, los esfuerzos resultaron infructuosos. Desde las 7 de la mañana muchas familias comenzaron a llegar y colocarse por donde pasaría la caravana, mientras que los uniformados realizaron cierres y desvíos de calles y avenidas aledañas.

Conforme transcurrieron las horas se agudizó el caos, pues los automovilistas buscaban alternativas para circular, razón por la cual avenidas como Chapultepec, Insurgentes, Circuito Interior, Fray Servando, Mariano Escobedo, Misisipi, Florencia y Cuauhtémoc, entre otras, se saturaron cuando el desfile apenas empezaba.

Aunado a eso, integrantes de organizaciones de ciclistas y defensoras de animales realizaron una manifestación en las calles del Centro.

Otra afectación fue que tres líneas del Metrobús, la 1, 4 y 7, suspendieron su servicio en esa parte de la ciudad, ya que varias estaciones dejaron de operar por el paso del desfile, situación que molestó a muchos pasajeros, quienes tuvieron que caminar largas distancias.

En las siguientes horas la escena se repitió: automovilistas en sentido contrario, insultos a policías de tránsito, imprudencia de conductores además de enojo y reclamos de peatones, pero la sonrisa de felicidad de los pequeñines alivió el resto de la tarde.