Viernes 2 de noviembre de 2018, p. 28
Acapulco, Gro., El policía federal Geovanni Raúl Mejía Olguín rindió protesta ante la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, como titular de la secretaría de seguridad pública, después de 37 días de que la corporación quedó acéfala por sospechas de infiltración del crimen organizado.
El 25 de septiembre la Secretaría de Marina y del Grupo de Coordinación Guerrero tomaron el control de la policía de Acapulco, detuvieron a dos mandos acusados de homicidio, desarmaron a los agentes, detectaron un faltante de 183 armas y comprobaron que sólo estaban certificados 674 elementos de un total de mil 309.
La munícipe, quien fue postulada por Morena, aseguró que Mejía Olguín es un civil con experiencia y cumple con todos los requisitos para desempeñar el cargo, además de que tiene la confianza y el aval de los grupos de coordinación estatal y municipal.
Señaló que los policías locales que fueron desarmados cinco días antes de que concluyera la administración del ex alcalde perredista Evodio Velázquez regresarán a sus funciones si aprueban el examen de control y confianza.
‘‘La seguridad pública, si no va de la mano de la participación social, con políticas preventivas que involucren al magisterio, padres de familia y todos los demás sectores, no dará resultados. Esperamos hacerlo lo más pronto posible’’, confió la edil.
El cabildo aprobó por mayoría la designación de Mejía Olguín, propuesto por la alcaldesa.
La secretaría de seguridad pública de Acapulco está integrada por alrededor de mil 300 policías, de los cuales mil 105 (85 por ciento) había aprobado exámenes de control y confianza el 25 de septiembre, según dio a conocer la anterior administración.
Sin embargo, en la revisión de expedientes del personal efectuada por el Grupo de Coordinación Guerrero se detectó que no se cumplió con los procesos de evaluación y certificación.