Jueves 1º de noviembre de 2018, p. a10
Boston. En medio de cañones de confeti, grandes multitudes de fanáticos –ahora acostumbrados al éxito de sus amados Medias Rojas– vitorearon ruidosamente al equipo mientras desfilaba por las calles de Boston a bordo de los tradicionales botes anfibios usados regularmente para pasear turistas por la ciudad.
El desfile comenzó el miércoles en el venerable estadio Fenway Park y recorrió varias de las principales calles y avenidas en el centro de la ciudad, con cientos de miles de fanáticos agolpados en las aceras. Muchos de ellos, ataviados con camisetas, sudaderas y gorros de los Medias Rojas, llegaron antes del amanecer para conseguir el mejor lugar posible.
Boston se consagró el domingo tras vencer a los Dodgers de Los Ángeles en cinco juegos, conquistando su cuarto campeonato de la Serie Mundial en los recientes 15 años. También se coronaron en 2004, 2007 y 2013 tras pasar previamente 86 años sin ganar un título, sequía que fue conocida como la Maldición de Babe Ruth
.
Los trocitos de papel rojo, blanco y azul llovían sobre la multitud en este fresco día otoñal, mientras los asistentes festejaban a los jugadores al pasar en los botes, emblemáticos de la ciudad. Los jugadores y sus familias saludaron con la mano desde los vehículos sin techo.
Alguien del público lanzó una lata llena de cerveza a uno de los botes, dañando ligeramente uno de los cuatro trofeos de la Serie Mundial que estaban siendo exhibidos.
La policía de Boston informó que arrestó a Patrick Connolly, de 19 años, acusado de alteración del orden público y agresión con un arma peligrosa. Dicen que golpeó a un hombre no identificado a bordo de uno de los botes anfibios.
Las medidas de seguridad eran muy estrictas a lo largo de la ruta, que pasó por el lugar de los mortíferos atentados del Maratón de Boston de 2013. No se permitió beber en público. Policías uniformados estaban colocados en la ruta y agentes vestidos de civil se mezclaban con la multitud. Las calles y avenidas cercanas fueron cerradas y el estacionamiento era limitado.
Durante una ceremonia previa al desfile en el Fenway, el mánager de los Medias Rojas, Alex Cora, agradeció a los aficionados por apoyar al equipo durante lo que llamó una temporada histórica
, en la que ganaron 108 partidos durante la campaña regular antes de vencer a los Yanquis de Nueva York, los Astros de Houston y los Dodgers de Los Ángeles en los playoffs.
Los fanáticos de Boston recibieron más buenas noticias ayer: el pítcher David Price anunció antes del desfile que se quedará en el equipo, tras declinar una opción de su contrato que le permitía declararse agente libre.
El zurdo, quien fue el lanzador ganador en el quinto juego, ganará 127 millones de dólares en los próximos cuatro años bajo el contrato de siete años por valor de 217 millones de dólares que firmó con Boston antes de la temporada 2016.