Tel Aviv. La cantante Netta (Toy) se siente identificada con el movimiento homosexual por razones personales, pues la joven israelí de 25 años que en mayo ganó el concurso de Eurovisión también ha conocido en carne propia la marginación. Toda la vida me dijeron lo que tenía que hacer, cómo me debía vestir, cuánto comer, que tenía que adelgazar, señaló en entrevista la intérprete, que no encaja en los cánones oficiales de delgadez y a quien le gusta actuar con colorida vestimenta.

Pero con la victoria en el concurso de Eurovisión, precisó, rompió fronteras y conceptos, ignoró los prejuicios y esa es la mayor victoria.

La cantante comenzará el próximo mes una gira por diferentes ciudades europeas, entre ellas Berlín, Londres y París.