Entre los llamados de justicia, garantías de no repetición y reparación del daño que han prevalecido en los Foros Escucha –organizados por el equipo de transición del próximo gobierno para la pacificación y la reconciliación nacionales–, la red Iglesias por la Paz, que une a diversos credos, demandó declarar a México como Estado en situación de emergencia ante el contexto de violencia general que se vive.

La violencia e inseguridad ocasionada por grupos del crimen organizado, junto con la respuesta militarizada, la impunidad y la cooptación de elementos del Estado por la delincuencia organizada, ha tenido como consecuencia el incremento de graves violaciones de derechos humanos y una situación similar a una guerra por la enorme cantidad de víctimas, señaló en un documento entregado a los organizadores.

El texto es un reflejo de las demandas en los distintos foros realizados desde agosto, que concluyen el próximo miércoles: Siguen siendo tema urgente la cantidad de desapariciones forzadas, feminicidios, ejecuciones extrajudiciales y tortura, así como la situación de inseguridad de personas o grupos vulnerables por razones de discriminación, como mujeres, la niñez, personas migrantes, pueblos indígenas, defensores de territorios, de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales, así como periodistas.

La red resaltó que en un proceso de justicia transicional y de lucha contra la impunidad, México puede involucrar a las iglesias como mediadoras en conflictos de paz, como ha ocurrido en otros países, pero requiere que tanto esas instituciones como el Estado asuman sus responsabilidades en los casos de pederastia. Es un grave problema que pocos se atreven a señalar y castigar. Por ello consideramos fundamental hacernos cargo de esta situación. Recordó que México ocupa el primer lugar en el mundo, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, en abuso sexual contra niños y adolescentes.