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Ocho carreras tienen poca demanda de empresarios
 
Periódico La Jornada
Domingo 21 de octubre de 2018, p. 23

Cincuenta por ciento de egresados de educación superior en el país elige entre ocho carreras que no están relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, las cuales tienen baja demanda en las empresas, indicó Graciela Rojas, presidente de Movimiento STEM.

En entrevista, la titular de esa asociación que busca impulsar que más niños y jóvenes tengan interés por estudiar alguna de esas carreras, con el fin de generar innovación y bienestar social y económico, agregó que la novena carrera, de entre las más elegidas por la mitad de los egresados, sí está relacionada con alguna de dichas áreas de estudio, pero la cifra es muy baja.

La importancia de que más niños y jóvenes se interesen por alguna de esas carreras en México radica en que 50 por ciento de las empresas enfrenta dificultades para encontrar a personas con las habilidades que se requieren, la cuales, en gran parte, están relacionadas con ciencias, matemáticas e ingenierías.

Mónica Flores Barragán, presidente de la American Chamber México, consideró que para ser un actor relevante ante la revolución 4.0, México debe potenciar su talento humano fortaleciendo la educación en STEM.

Rojas indicó que ocho de los empleos mejor pagados en el país están relacionados con las carreras mencionadas.

No se cubre la demanda

Destacó que actualmente no se cubre la demanda de personal de las empresas. Ejemplificó que datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que sólo 27 por ciento de hombres estudia alguna carrera STEM, mientras en el caso de las mujeres es de 8 por ciento.

Rojas indicó que lo anterior no únicamente refleja escasez de talento en esas áreas, sino la brecha de género, la cual se busca combatir mediante la inclusión.

Comentó que es necesario que más personas cuenten con las habilidades que se requieren para enfrentar la cuarta revolución industrial, así como los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas.

En ese tenor, hizo hincapié en que la generación de entre nueve y 19 años es la que puede acabar con la pobreza extrema, pero la última que puede frenar el cambio climático. Si esta generación no lo logra, como humanidad no lo vamos a lograr.

La presidenta de Movimiento STEM dijo que uno de los retos para avanzar es mediante la enseñanza, pues en vez de aprender la tabla periódica de memoria se debe partir de un problema social real, como resolver el problema de abasto de agua en una comunidad.