La Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA) y analistas aeroportuarios, así como expertos ambientalistas que desde hace cuatro años analizan el proyecto de la terminal área que se construye en Texcoco, expresaron opiniones encontradas sobre la pregunta que se formulará en la consulta convocada por el equipo del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.

La representación de ASPA consideró que la pregunta con dos opciones de respuesta es sencilla, pero no ofrece contexto técnico sobre los principales argumentos en favor y en contra de la obra.

La encuesta es un método que usó el gobierno electo para adoptar una decisión, pero el peso de esa determinación la tendrá que adoptar el Estado mexicano y asumir las consecuencias, buenas o malas. La propia Organización de Aviación Civil Internacional aseguró que Texcoco es la mejor opción para el nuevo aeropuerto y que Santa Lucía no está contemplada como alternativa, dijo Francisco Gómez Ortigoza, secretario técnico de la ASPA.

En tanto, Fernando Gómez Suárez, analista del sector aeroportuario, dijo que la pregunta debió ser avalada por alguna institución jurídica para evitar suspicacias de que tenga algún sesgo. Lo principal es desconcentrar el aeropuerto y una solución es construir o crear un sistema de aeropuertos de la zona centro, que comprende Toluca, Cuernavaca, Puebla y Querétaro, así como elaborar una política integral de varias dependencias que formulen una estrategia de crecimiento o desarrollo aeroportuario turístico y económico.

En tanto, en el foro El Nuevo Aeropuerto Internacional de México. Diálogo con las voces de resistencia, organizado por la Universidad Iberoamericana, Fernando Córdova, coordinador del Grupo de Análisis de Manifestaciones de Impacto Ambiental del Programa Observatorio Socioambiental, dijo que la pregunta está bien en lo que se está eligiendo: un proyecto central que concentre todo o un sistema aeroportuario. Las preguntas están bien desarrolladas, no las siento sesgadas en términos de lo que se está planteando.

Consideró que el proyecto de nuevo aeropuerto fracasará, porque se han menospreciado los conflictos ambientales, constructivos, sociales y económicos.