Lunes 15 de octubre de 2018, p. 28
Managua. Al menos 39 personas, entre ellas varios dirigentes opositores al gobierno de Nicaragua y una activista de derechos humanos, fueron detenidas este domingo por la policía en esta capital, en medio del rechazo y la condena de dirigentes de organismos internacionales de derechos humanos.
Las detenciones ocurrieron en el sector comercial Camino de Oriente, donde manifestantes se reunieron para celebrar la marcha Unidos por la Libertad, convocada por la coalición opositora Unidad Azul y Blanco.
La policía había advertido el sábado que la protesta era ilegal. El presidente Daniel Ortega criticó la movilización durante un discurso ante sus seguidores. Están sedientos de sangre
, señaló.
Policías antimotines rodearon a los manifestantes y detuvieron a decenas de ellos en medio de golpes y forcejeos, según imágenes de la televisión local.
La policía informó que arrestó a 38 personas, de las cuales ocho fueron liberadas. El resto serán remitidas a las autoridades para enfrentar un juicio.
Entre los detenidos figuran José Antonio Peraza, dirigente del Movimiento por Nicaragua; Suyen Barahona, presidenta del Movimiento Renovador Sandinista; Ana Margarita Vijil, ex presidenta de la misma organización, y la activista Tamara Dávila Rivas.
En tanto, oficiales de Migración retuvieron en el aeropuerto Sandino a las defensoras de derechos humanos Haydeé Castillo y Lottie Cunningham, quienes se disponían a viajar a Estados Unidos.
Alejandra Castillo, tía de la primera, dijo que a Cunningham se le permitió viajar, pero su sobrina fue arrestada y trasladada a la cárcel de El Chipote.
El obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio Báez, cuestionó la represión y las detenciones arbitrarias
y apremió al gobierno a dialogar para poner fin a la crisis.
Las detenciones fueron criticadas también por la CIDH, que rei-teró que la protesta social es un derecho legítimo de los ciudadanos
, mientras la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos renovó su llamado al gobierno a que cese de inmediato el acoso, la intimidación y la penalización de las protestas
.
También protestaron Amnistía Internacional, Human Rights Watch, el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional y la activista Bianca Jagger.