Integrantes de la Coordinación de Pueblos, Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco acusaron al alcalde, José Carlos Acosta Ruiz, de ser omiso al no decretar la suspensión de permisos para nuevos desarrollos inmobiliarios, a pesar del acuerdo de las alcaldías gobernadas por Morena.

Detallaron que es el único de los 11 alcaldes de Morena que no ha anunciado la moratoria correspondiente, a pesar de que el caos inmobiliario amenaza y pone en riesgo el suelo de conservación en Xochimilco y la zona declarada patrimonio mundial.

Lo más preocupante, agregaron, es que casualmente, en los primeros días de su gobierno dos desarrollos que se construyen en barrios de Xochimilco y que estuvieron clausurados durante varios meses –plaza Indupan, en el pueblo de Tepepan, y Lecaroz, en el barrio de Xaltocan–, reanudaron sus actividades para abrir sus puertas.

Esta situación no sólo prueba la incongruencia de las declaraciones de Acosta, quien se comprometió en campaña a no permitir nuevos desarrollos, sino que podría significar complicidad con el sector inmobiliario, justo al inicio de su gestión, reprocharon.

La agrupación vecinal exigió la publicación inmediata del decreto para suspender los trámites para nuevos desarrollos, y la reanudación de los procesos de verificación y revisión puntual de los que se construyen, así como los que han sido concluidos.

Por separado, la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios sección Ciudad de México se adhirió al llamado que hizo la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios al Gobierno de la Ciudad de México para que el cierre de ventanillas para trámites y permisos de construcción anunciadas por alcaldías como Miguel Hidalgo, Iztacalco, Benito Juárez y Coyoacán se dirijan sólo a los proyectos que se encuentran con inconsistencias o incumplimiento de la ley.

Sin referirse al sinnúmero de quejas ciudadanas que existen por las irregularidades con que actúa ese sector en la capital del país, el presidente de la AMPI, Alejandro Kuri Pheres, dijo que “estas decisiones ocasionan incertidumbre y detienen el desarrollo de sectores dinámicos como el inmobiliario y con alto impacto económico para la Ciudad de México y el país.

Esto afecta y afectará en los próximos meses a un sector que trabaja día a día con las normas que la ley impone y que al igual que los socios de ADI, destinan fuertes inversiones y generan más de 250 mil empleos directos y otro tanto de indirectos, tanto en la capital del país como en el resto de la República, dijo.