Domingo 14 de octubre de 2018, p. 8
Madrid. Ir al cine a ver el esperado estreno de un youtuber de moda y encontrarse con una escena de tres minutos repetida en bucle durante una hora fue la experiencia que sembró de caos y escándalo el Festival de Cine de Sitges, España.
La experiencia fue obra de Ismael Prego, Wismichu. El youtuber había despertado expectativa promocionado a gran escala una supuesta película, Bocadillo, en el popular festival de cine fantástico, pero lo que ofreció fue muy diferente. En contra de lo que prometía el tráiler, los espectadores se encontraron con una misma escena (varios youtubers entrando a un bar y pidiendo un bocadillo) repetida en bucle durante una hora. La indignación no tardó. Varios asistentes comenzaron a insultar al youtuber de 25 años y a gritar “Wismichu, cabrón, devuélveme el dinero” durante la proyección, como reflejaron videos en redes sociales y la prensa.
Pero la falsa película era algo más que una broma pesada: en la entrada a la sala, un cartel indicaba que en ese espacio se filmaría el documental
titulado El Bocadillo y que los espectadores cedían sus derechos de imagen a la productora.
Varias cámaras en la sala lo confirmaban: la película era en realidad la filmación del escándalo. Durante el pase, Wismichu cambió su nombre de usuario en Twitter a El mejor director de ESPAÑA y escribió: Vosotros sois mi película
.
Conocido por sus bromas y provocaciones, Wismichu es uno de los youtubers más populares de España, con casi ocho millones de seguidores en la plataforma de videos y 2.85 millones en Twitter.