Es imposible incrementar en lo inmediato el presupuesto federal destinado a garantizar la seguridad pública, en virtud de otras prioridades, como el combate a la pobreza, la desigualdad y la marginación, aseveró el futuro titular de la Secretaría de Seguridad Pública del próximo gobierno federal, Alfonso Durazo.

Destacó, sin embargo, que el equipo del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, escucha las propuestas de todos los sectores para enriquecer y definir sus políticas en la materia, las cuales se presentarán en los próximos días y en las que serán puntos medulares el fortalecimiento de las policías municipales, el combate a la corrupción, la restructuración de la Policía Federal (PF), la optimización de los recursos y la atención en prevención más que en reacción.

El futuro funcionario federal participó en el foro Diálogos sobre seguridad y desarrollo policial, organizado por diferentes colectivos civiles y académicos, con el apoyo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, donde escuchó más de 50 propuestas para mejorar la seguridad y contribuir a la pacificación del país, que fueron resultado de siete mesas de trabajo.

La cantidad, dimensión y amplitud de propuestas aquí recogidas, nos dan una idea de la dimensión del reto y de todo aquello que debemos cambiar. Vistas las cosas con realismo, no todo lo que aquí se ha planteado será posible llevarlo a cabo, no al mismo tiempo y no de inmediato, señaló Durazo.

Una de las principales propuestas de los grupos reunidos fue el triplicar el presupuesto en materia de seguridad, a lo que el futuro secretario de seguridad respondió que será imposible, ya que se debe priorizar el combate a la pobreza, la desigualdad y la marginación. Frente a esto, el reto es cómo optimizamos lo que actualmente tenemos, pues hoy se destina 0.8 por ciento del producto interno bruto a seguridad.

Subrayó que los esfuerzos del próximo gobierno también se centrarán en el combate a la corrupción en la administración pública, incluidas las instituciones de seguridad y justicia; elevar el estado de fuerza de la Policía Federal, y priorizar como la policía más importante a las corporaciones locales, y es que en ese ámbito se ha ubicado gran debilidad, ya que de casi 2 mil 500 municipios en el país, en 800 hay poco más de 20 policías y están insuficientemente capacitadas.

Otro de los objetivo será impulsar desde las corporaciones policiacas acciones preventivas del delito, más que reactivas, pues donde se gasta prácticamente todo el presupuesto y los esfuerzos es en la reacción ante acciones criminales.

En torno a la legalización de algunas sustancias como método para contrarrestar la violencia, dijo que el equipo de López Obrador analiza plantearlo como uso lúdico para la mariguana y para fines médicos en otras.