Diputados de Morena y del Partido del Trabajo (PT) en el Congreso de la Ciudad de México respaldaron la decisión del jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, de retirar las placas en estaciones del Metro con el nombre del ex presidente Gustavo Díaz Ordaz.

El diputado del PT y líder del movimiento estudiantil del 68 Jesús Martín del Campo refirió que es una demanda añeja del Comité 68, no de ahora, hace mucho, que es además una medida resarcitoria para las víctimas, cuando un dictador es enjuiciado por crímenes de Estado que no prescriben, que en ningún sitio público esté su nombre.

El Comité 68 ha solicitado que las calles, plazas públicas y escuelas no tengan el nombre de Luis Echeverría y Díaz Ordaz, por lo que hicieron, apuntó.

El diputado Alejandro Encinas Rodríguez, de Morena, dijo que se tendría incluso que considerar cambiar hasta el nombre de algunas colonias, como la Díaz Ordaz, en Coyoacán, y la Luis Echeverría, en Tlalpan. Son temas que la población deberá juzgar y esperamos que ella misma solicite el cambio de nombres de los lugares donde residen.

Dijo que es una señal positiva; no tenemos por qué estar reivindicando, en primer lugar, la imagen de ningún funcionario con las obras públicas, y mucho menos a quien cometió delitos de lesa humanidad, que en este caso, afirmó, contribuye a reivindicar el derecho a la memoria, la verdad y la justicia como temas fundamentales para la pacificación y la reconciliación nacional.

El 68, agregó, no tiene fecha de retroactividad y podría juzgarse como la guerra sucia y las desapariciones forzadas de Ayotzinapa, aun cuando quien asumió la responsabilidad en el caso de Tlatelolco ya haya muerto.

La coordinadora de Morena y presidenta de la Junta de Coordinación Política, Ernestina Godoy Ramos, dijo que es una postura política del jefe de Gobierno decir que el lugar de este señor (Díaz Ordaz) es el basurero de la historia y no tiene que estar en las estaciones del Metro.

La legisladora consideró que en general no era bien visto que se estilara poner grandes placas con los nombres de quienes estaban en la Presidencia de la República o en la jefatura de Gobierno de la ciudad, porque además se hace con recursos públicos y es una manera de exhibirse y hacerse promoción.