La Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) ratificó que si alguno de los efectivos que forman parte de esa institución está involucrada en la desaparición de 36 personas en Nuevo Laredo, Tamaulipas, ocurrida entre febrero y mayo de este año, actuará con estricto apego a la ley, procediendo con rigor y contundencia y queda atenta de la resolución que se emita.

Recordó que desde mayo pasado aceptó las medidas cautelares dictadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y que por instrucciones del secretario de Marina, 257 efectivos que realizaban operaciones en esa ciudad fueron reunidos para estar a disposición de las autoridades por si los requieren.

Los casos de desaparición forzada en los que presumiblemente estarían involucrados marinos se dieron a conocer por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) en México.

En un comunicado, la Marina informó que en mayo dio vista al Órgano Interno de Control de esa institución sobre las quejas a las que dio entrada la CNDH y de los señalamientos del representante en México de la ONU-DH, para que de ser el caso se inicie el procedimiento administrativo. También se dio vista de esos hechos, los cuales pudieran ser constitutivos de delito, a la Fiscalía General de Justicia Militar a fin de que en el ámbito de sus atribuciones y facultades se les inicie el proceso respectivo, indicó.

Además, como parte de las diligencias se autorizó el ingreso a bases de operaciones establecidas en Nuevo Laredo, tanto al personal de la PGR como de la CNDH, quienes fueron acompañados por familiares de desaparecidos.