Querétaro, Qro., Manuel Gómez Morín Martínez del Río inició ayer en esta ciudad la recolección de firmas para registrarse como candidato a la dirigencia nacional del PAN.

En su acto señaló que el apoyo expresado por gobernadores emanados del blanquiazul hacia otro aspirante a la dirigencia, Marko Cortés Mendoza, es un mensaje de que los mandatarios estatales tienen peso en el partido, que los gobernadores están por encima de los militantes y se ponen de acuerdo con grupos cupulares para determinar quién va ser el jefe nacional.

En conferencia de prensa, indicó que empezó su campaña en Querétaro por ser una localidad emblemática en la historia de México, no por estar ahí la casa del ex candidato presidencial panista Ricardo Anaya Cortés.

Confió en que tiene piso parejo y que habrá transparencia en la elección interna de su partido, además de que los acuerdos cupulares de los gobernadores del PAN implican que hay grupos que piensan que poniéndose de acuerdo arriba van a lograr su objetivo.

Indicó que durante los últimos tres años en el interior del PAN no participaron los militantes en la toma de decisiones porque había acuerdos cupulares, lo que va en contra de la naturaleza y la cultura de ese instituto político, y que son prácticas vistas en otros partidos.

Señaló que la vida del blanquiazul debe ser de abajo para arriba, al surgir desde la militancia.

Consideró que ese es el reto del PAN: que los militantes participen, además de recuperar la confianza de éstos y eso se reflejará sólo si la contienda interna transcurre con equidad, respeto y transparencia.

Agregó que un reto más en el PAN es presentar un proyecto de partido moderno, que sea contrapeso en el ejercicio del poder y en que la militancia sea tomada en cuenta con un estrecho vínculo con la sociedad.

El mínimo de firmas a recolectar por candidato es de 28 mil, que representan 10 por ciento del padrón del PAN.