Venecia. El cineasta Alfonso Cuarón hizo historia, no sólo por conquistar el primer León de Oro para una película mexicana, Roma, en la edición 75 del festival de Venecia, sino también porque se trata de la primera producción de la plataforma de streaming Netflix que se alza con el gran premio de uno de los certámenes de cine más prestigiosos del mundo.

Cuarón, de 56 años, no deja de ser pionero. Fue también el primer latinoamericano en llevarse a México el Óscar al mejor director en Hollywood y ahora lo hace con un León de Oro, que el año pasado se adjudicó su amigo Guillermo del Toro, por la cinta estadunidense La forma del agua.

Roma, un personal y conmovedor retrato en blanco y negro de su infancia en Ciudad de México, está protagonizada por Yalitza Aparicio y la intérprete de teatro Marina de Tavira. Además, está dedicada a Libo, la niñera que lo cuidó cuando era pequeño.

“Esta película, Libo, es el producto de mi inmenso amor a ti, a mi familia y a México. Gracias, gracias, gracias”, dijo el realizador tras alzar el premio y recordar que ayer sería cumpleaños de su nana.

Sin celebridades, el filme más íntimo del realizador se inspira en su propia familia, en los amores y desamores de criados y patrones; es un documento emocionante y conmovedor sobre las diferencias sociales y raciales de su país.

Guillermo del Toro, en su calidad de presidente del jurado, explicó en conferencia que una de las razones por las que este drama se impuso al resto de las 20 candidatas al premio fue porque constituye un fresco y a la vez un retrato íntimo que conviene recuperar de su país.

El jurado fue imparcial, asegura Del Toro

Para entender el presente tenemos que entender el pasado y llegar a un futuro donde no repitamos ciertos errores, indicó Del Toro, quien defendió de nuevo su imparcialidad a la hora de juzgar la película.

Fue una decisión unánime de todo el jurado. Nueve contra cero, insistió. El premio a la producción de Cuarón supone, además, un espaldarazo a las producciones de las plataformas de streaming, que están cambiando radicalmente el sector cinematográfico. Las películas pasan a ser mostradas en las plataformas y queda en un segundo plano el lanzamiento en salas.

En el pasado festival de Cannes, Roma quedó fuera de la competencia por desacuerdo al respecto entre los organizadores del certamen y la plataforma streaming. Ante los agoreros anuncios del fin del cine en las salas, Del Toro aseguró ayer que no cree que con este premio se dé el inicio del fin de nada. Es la continuación del proceso iniciado hace más de 100 años. Hacer declaraciones demagógicas no sirve para nada, indicó.

Durante la presentación de su filme, Cuarón ya había advertido que el futuro del cine pasaba indefectiblemente por los dispositivos caseros. El cineasta considera que una historia en blanco y negro hablada en castellano y mixteco tiene más posibilidades de tener eco si además de ser mostrada en salas llega a más de un centenar de países que integran la red de Netflix.

Uno tiene que pensar en la película a largo plazo. El público tendrá opción de verla en sala, pero lo realmente importante es que tenga cierto impacto para que no se pierda con el paso del tiempo, dijo entonces el realizador.

Ahora son dos las cintas de Netflix que se van con premio. Aparte de Roma, los hermanos Joel e Ethan Coen se alzaron con el premio a mejor guión por una compilación del western dividido en seis historias The Ballad of Buster Scruggs.

En tanto, el León de Plata por mejor dirección fue para el francés Jacques Audiard, que también presentó en la Mostra un western, The Sisters Brothers.

El Gran Premio del Jurado fue para el griego Yorgos Lanthimos por su atrevida y femenina versión del mundo de las intrigas cortesanas en The Favourite, un curioso drama centrado en una veleidosa reina británica a la que encarna brillantemente la británica Olivia Colman, acreedora de la Copa Volpi a la mejor actriz.

La Copa Volpi para el mejor actor fue para el estadunidense Willem Dafoe, quien, finalmente a sus 63 años, es distinguido por un gran festival. Su transformación en el torturado pintor Vincent Van Gogh para Julian Schnabel en At Eternity's Gate fue aplaudida por la crítica en Venecia.

Otra de las vencedoras del certamen italiano es la producción australiana The Nightingale, dirigida por Jennifer Kent, la única mujer entre los 21 candidatos al León de Oro. Este drama sobre la brutal colonización británica de Tasmania se llevó el Premio Especial del Jurado y su coprotagonista, el tasmano Baykali Ganambarr obtuvo el galardón Marcello Mastroianni al intérprete revelación.

La edición 75 del Festival de Venecia se ha visto marcada por el gran lanzamiento como actriz de la cantante Lady Gaga en el drama romántico A Star is Born, del actor y ahora director Bradley Cooper.

Además, también dejó huella el paso del ex presidente uruguayo José Mújica, quien entusiasmó al público con el documental El Pepe, una vida suprema, del serbio Emir Kusturica, y aunque sólo hubo una directora entre las 21 propuestas al León de Oro, el tema de la presencia de la mujer en el cine ha estado más presente que nunca. Tanto público como organizadores comienzan a tomarse en serio la cuestión de género.

Los miembros del jurado de la muestra, que se clausuró ayer, pidieron la liberación inmediata del realizador de cine ucraniano Oleg Sentsov, quien está en huelga de hambre desde mayo pasado en una prisión rusa.

Los nueve miembros del jurado presidido por Del Toro se tomaron una foto juntos en el Lido veneciano con un cartel de solidaridad con el cineasta, quien está acusado de planificar atentados en Crimea.

Expresamos nuestra extrema preocupación por las condiciones físicas del director, condenado a 20 años de prisión por un tribunal militar ruso y prisionero desde hace más de cuatro años en el norte de Siberia, escribieron en una declaración divulgada por la oficina de prensa de la Mostra de Venecia.