Londres. La presencia de las artistas mexicanas Frida Escobedo, Frida Kahlo y Alida Cervantes abarca un radio de dos kilómetros en la capital británica.

El pabellón de las Serpentine Galleries, de Frida Escobedo (1979), montado en los jardines Kensington, es sin duda el acto más relevante.

Es un espacio efímero que se convirtió desde su apertura, en 2000, en una cita anual señera de la arquitectura experimental a escala internacional.

La fama del pabellón se forjó con la participación ‘‘monopolizada” de los premios Pritzker al menos durante el primer decenio. Luego, de manera paulatina, se ha ido abriendo a las jóvenes promesas de la arquitectura mundial o a reconocidos arquitectos de la periferia global, como al africano Francis Kéré, el año pasado.

Así se explica la presencia actual de la mexicana, que por sus características (joven, mujer y no europea) rompe con el conservadurismo del pasado. El único antecedente latinoamericano había sido el del brasileño Óscar Niemeyer.

Exposición de Frida Kahlo

La exposición Frida Kahlo: Making Her Selfup (Frida Kahlo: inventándose), en el Museo Victoria & Albert, prueba que la pintora mexicana puede llenar espacios culturales con su mera presencia y sin un solo cuadro. Reúne fetiches, como sus vestidos (mostrados en la última sala de manera estelar), cajas de medicinas, esmaltes de uñas, corsés, zapatos, prótesis y fotografías.

Al salir de la sala, una magnífica tienda casi tan grande como la exposición aguarda al visitante donde puede adquirir gadgets (dispositivos) imaginables. No falta nada… ni siquiera los frijoles refritos.

La visita final es al arte de Alida Cervantes (1972), quien participa en la muestra colectiva Known unknowns (Incógnitas conocidas), montada en la Galería Saatchi, dedicada a artistas desconocidos.

El célebre galerista Charles Saatchi desafía repetir el milagro de lanzar, como hizo con los Young British Artists, a creadores latinoamericanos y africanos desde hace años. Es muy probable que los participantes en esa exposición acudirán a la próxima Bienal de Venecia. ¡Hagan sus apuestas!