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Sufre en su visita a Torreón

Cruz Azul sigue firme en la cima tras empatar con el campeón Santos

El partido se desarrolló con buen ritmo y emociones en las porterías

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▲ Martín Cauteruccio y Édgar Méndez festejan la anotación que ponía en ventaja a los celestes.Foto Jam Media
 
Periódico La Jornada
Lunes 27 de agosto de 2018, p. 3

Torreón, Coah., Con gran sufrimiento, Cruz Azul mantuvo lo invicto y el liderato al empatar 1-1 con Santos, que se mostró a la altura de campeón al complicar el duelo hasta el último instante. La Máquina no cede terreno en la cima y llegó a 17 unidades, al tiempo que los Guerreros acumularon 14 puntos y conservan el tercer puesto, al cierre de la jornada siete del torneo Apertura 2017.

Martín Cauteruccio rompió con una ríspida tónica que imperaba en la cancha al abrir el marcador al minuto 76, mientras Jesús Corona se mostró imponente bajo el arco. Los Guerreros dieron pelea y rescataron la igualada con un tanto de Déinner Quiñones cerca de concluir el encuentro.

El honor y lo invicto estaban en juego, por lo que ninguno de los dos clubes estaban dispuestos a caer con facilidad. Los celestes fueron más ofensivos en los primeros instantes; si no concretaron el gol fue porque se toparon con una muralla en la zaga local.

Elías Hernández logró vencer a la defensa de Santos y mandar un pase filtrado para Milton Caraglio, quien se vio presionado por el rival y no alcanzó a conectar el esférico.

Los celestes se apoyaron en Hernández para armar el ataque y el delantero se acercó a la meta del adversario con un disparo de larga distancia que pasó desviado.

Ante el perfecto juego de ambos clubes, el duelo se tornó ríspido. Tanto La Máquina como los Guerreros sufrían para poner tensión en la cancha; había orden aunque carecían de magia.

Sin su delantero estrella, Julio Furch, quien está lesionado, el plantel dirigido por Salvador Reyes se vio limitado en la ofensiva y recurrió a Jonathan Rodríguez, así como a Eduardo Herrera.

Por primera vez desde que comenzó el torneo, las cosas no le salían bien a los celestes. Se les complicaba pasar de la mediacancha, además el rival era meticuloso en el ataque.

Pedro Caixinha, timonel de Cruz Azul, sufría para vencer a Santos, el equipo con el que fue campeón hace un par de años en su primera experiencia en el futbol mexicano.

Los locales salieron con más intensidad en el complemento y enseguida pusieron en complicaciones a La Máquina. En un contrataque, Rodríguez se enfiló a gran velocidad a la meta y al disparar apareció Corona, quien alcanzó a desviar el esférico para que pasara a escasos centímetros del poste izquierdo.

Las circunstancias del juego requerían de cambios drásticos, por lo que Caixinha modificó su esquema ofensivo. Édgar Méndez sustituyó a Elías Hernández, quien por primera vez no pudo desequilibrar al rival, y Ángel Mena salió para dar espacio a Cauteruccio.

Presionado en la búsqueda del gol, Brian Lozano lanzó un disparo casi desde la mediacancha que rozó el poste izquierdo del arco.

Corona salvó a los celestes al atajar con un pie un disparo de Osvaldo Martínez dentro del área. En el rechace, los locales intentaron sorprender al arquero, pero apareció Julio Domínguez y sacó el esférico.

El sufrimiento de La Máquina terminó en un contragolpe cuando Cauteruccio sorprendió al filtrarse por el costado izquierdo y mandar un disparo que pasó en medio de las piernas del guardameta Jonathan Orozco para entrar a las redes.

Caixinha abrazó con euforia al cuerpo técnico, finalmente llegaba el ansiado gol después de un duelo angustioso. Los seguidores celestes también se dejaron llevar por el ímpetu. La zozobra cayó entre los aficionados del conjunto local.

Los últimos minutos fueron de tensión. Presa del nerviosismo, Caixinha no dejaba de dar vueltas en el área técnica y lanzaba órdenes para mantener la ventaja, pero sus temores se tornaron en realidad.

Santos igualó el marcador en el último tramo luego de que Rodríguez desbordó por la derecha en un contrataque y mandó un centro, para que Quiñones definiera con suave toque frente al arco y desatara el júbilo entre la afición de los albiverdes.

Las emociones se vieron hasta el último minuto, cuando Gerardo Artega estuvo cerca de romper el empate con un cabezazo que pasó por arriba del travesaño. El duelo terminó caliente y poco antes del final Corona recibió una amonestación por reclamar al árbitro.