Washington

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, denunció este domingo con enfado la investigación federal sobre la intromisión rusa en las elecciones presidenciales de 2016 y la definió como ¡el macartismo en su peor momento!, al insistir en que había autorizado al abogado de la Casa Blanca a testificar para cerrar el asunto.

La tormenta tuitera de Trump fue provocada por un informe de primera plana en el New York Times, en el cual se detallaba que el abogado de la Casa Blanca, Don McGahn, dio al fiscal especial para el caso, Robert Mueller, una descripción inusualmente detallada del pensamiento de Trump durante episodios claves bajo investigación.

Trump –quien ya había abordado el tema el sábado– intensificó sus ataques contra el artículo y la investigación, en una serie de tuits matutinos, al criticar al New York Times por insinuar que McGahn se había vuelto en su contra.

“No tengo nada que esconder... y he demandado transparencia para que esta rígida y desagradable caza de brujas llegue a su fin.

¡Tantas vidas se han arruinado por nada, el macartismo en su peor momento!

Mueller investiga si el presidente intentó obstruir la justicia, y también si su campaña se coludió con el esfuerzo encubierto de Rusia para influir en las elecciones presidenciales de 2016 en favor de Trump.

De acuerdo con el Times, McGahn expuso a los investigadores la furia de Trump por la investigación y las formas en que le pidió a McGahn que respondiera.

Entre los episodios que atestiguó, estuvo el momento en que Trump despidió al ex director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), James Comey, y su obsesión con poner a alguien leal a cargo de la investigación, según el Times. Señaló que McGahn desempeñó un papel clave para evitar que Trump despidiera a Mueller, quien fue fiscal especial luego del despido de Comey.

Trump dijo que la historia era una pieza falsa y pareció particularmente indignado por la sugerencia de que McGahn era un traidor como John Dean, el ex consejero de la Casa Blanca que testificó contra el presidente Nixon durante el escándalo de Watergate.

“El fallido New York Times escribió una historia que hizo que pareciera que el consejo de la Casa Blanca (sic) se había vuelto contra el presidente, cuando en realidad es todo lo contrario, y los dos reporteros falsos sabían de esto. Por eso los medios de noticias falsas se han convertido en el enemigo del pueblo. ¡Qué mal por Estados Unidos!”

¡Estudien al fallecido Joseph McCarthy, porque estamos en un periodo con Muller y su pandilla en que hacen que Joseph McCarthy luzca como un bebé! ¡Caza de brujas fraudulenta!, añadió.

También acusó a China de haber interferido en los comicios estadunidenses. Todos estos idiotas que se enfocan en Rusia deberían comenzar a mirar en otra dirección: China, tuiteó Trump en medio de una serie de mensajes denunciando con vehemencia la censura de las voces conservadoras en las redes sociales.

A su vez, el abogado de Trump, Rudolph Giuliani, dijo que la verdad no es la verdad, cuando explicaba por qué toma con cautela la posibilidad de permitir que el mandatario acuda a una entrevista que podría ser una trampa para que cometa perjurio.

En el programa Meet the Press, de la NBC, cuando el entrevistador Chuck Todd le respondió: La verdad es la verdad, Giuliani le dijo: “No, no es la verdad. La verdad no es la verdad. Donald Trump dice: ‘no hablé con Comey sobre Flynn’. Y Comey dice: ‘sí hablaste de eso’. Dime tú cuál es la verdad”.

Los comentarios dejaron desconcertado a Todd.